La seguridad telefónica en España está bajo amenaza debido a un tipo de estafa que ha proliferado notablemente este 2025. Esta modalidad, ampliamente difundida entre clientes de Movistar, Vodafone, Pepephone y otras compañías, consiste en una técnica conocida como el timo de la doble llamada, que busca confundir a los usuarios para que cambien de operador bajo falsas promesas.
Con la evolución constante de las estrategias de los ciberdelincuentes, las estafas telefónicas han refinado sus métodos para parecer cada vez más legítimas, explotando la confianza del usuario en entidades reconocidas y el desconocimiento general sobre las normativas vigentes.
Hoy en día, la vulnerabilidad de los consumidores es un factor explotado por los estafadores que buscan beneficios económicos sin importar las consecuencias para las víctimas, quienes pueden verse atrapadas en contratos engañosos o sufrir perjuicios económicos indirectos.
Qué es el timo de la doble llamada
Esta estafa telefónica se caracteriza por la realización de dos llamadas consecutivas. En la primera, el estafador se identifica como un empleado de la operadora actual del usuario, advirtiendo sobre una supuesta subida inminente en la factura de entre 15 y 20 euros. Esta afirmación es completamente falsa y está diseñada para generar desconfianza y malestar hacia el proveedor de servicios actual.
Tras unos minutos, el usuario recibe una segunda llamada, esta vez supuestamente de otra compañía que ofrece ventajas bastantes atractivas, como tarifas reducidas o mejores condiciones. En algunos casos, esta persona incluso asegura que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) avala la oferta, una estrategia destinada a dotar de credibilidad la llamada.
Es importante subrayar que, aunque esta maniobra no conlleva un robo directo, los beneficiados son únicamente los estafadores, que logran que el usuario cambie su contrato bajo premisas engañosas.
Cómo identificar cuándo una llamada es fraudulenta
Actualmente, la mayoría de los teléfonos modernos cuentan con sistemas para detectar y bloquear llamadas fraudulentas o spam. Sin embargo, estas herramientas no siempre ofrecen la protección completa necesaria, por lo que es vital desarrollar una actitud crítica y realizar comprobaciones básicas antes de actuar basándose en llamadas de este tipo.
Una señal clara de alarma es recibir dos llamadas consecutivas durante la misma jornada y sobre el mismo tema, especialmente si la primera comunica una subida repentina en la tarifa y la segunda intenta ofrecer un cambio de operador. Este patrón es uno de los más comunes en esquemas de timos telefónicos.
Además, si la supuesta subida mensual supera los 10 euros, conviene sospechar, ya que la práctica habitual del sector es anunciar incrementos de importe mucho menores, usualmente entre uno y cinco euros.
También es crucial señalar que, por ley, las teleoperadoras están obligadas a notificar a sus clientes con al menos 30 días de antelación cualquier modificación que implique un incremento en las tarifas. Por lo tanto, recibir notificaciones por teléfono sobre aumentos inminentes e inmediatos carece de fundamento legal y debe considerarse motivo para desconfiar.
Por último, la falta de identificación clara durante la segunda llamada, o la mención infundada de recomendaciones por parte de la OCU, constituyen indicadores claros de una posible estafa.
Hay que colgar directamente a todas las llamadas con "ofertas". Nadie da duros a cuatro pesetas. Alegremente nos metemos en páginas web y damos a "aceptar" sin mirar, y nuestros datos se ceden a estas empresas comerciales.... Alerten a las personas mayores y más vulnerables