La preocupación por la seguridad del hogar aumenta especialmente cuando las personas se ausentan, sobre todo en periodos vacacionales. Una de las inquietudes más frecuentes es el temor a que delincuentes aprovechen estas ausencias para cometer robos. Por ello, es fundamental implementar estrategias que minimicen estos riesgos y generen la impresión de que la vivienda está habitada.
Una de las maneras más sencillas y eficazmente recomendadas para disuadir a los ladrones es aplicar lo que se ha conocido popularmente como 'la técnica del felpudo'. Consiste en hacer que la esterilla de la puerta esté en constante movimiento, simulando actividad en el hogar. Para ello, bastará con pedir a un vecino o familiar que alargue o modifique la posición de la alfombrilla regularmente. Con este simple gesto, se crea la ilusión de que la vivienda no está deshabitada, dificultando así la tarea de los intrusos.
Además del movimiento de la esterilla, otro consejo indispensable para quienes se van de vacaciones es el control del buzón de correos. Aunque parezca un detalle menor, el buzón lleno es una señal inequívoca para los ladrones: indica ausencia prolongada y falta de vigilancia. Por tanto, coordinarnos con vecinos o familiares para vaciarlo de forma periódica puede ser crucial para protegernos.
Cómo mantener la impresión de que hay gente en casa
Una vivienda con persianas permanentemente cerradas es otro atractivo para los delincuentes, pues la falta de movimiento visual denota falta de ocupación. Conscientes de esto, se recomienda que alguien suba y baje las persianas en diferentes momentos del día, preferiblemente en horarios habituales para quienes viven allí.
En ocasiones, no es posible contar con la ayuda de vecinos o familiares constantemente, por lo que la instalación de sistemas automatizados puede ser una opción a considerar. Actualmente, en España existen soluciones tecnológicas que permiten controlar persianas, luces y aparatos eléctricos desde el móvil. Estos dispositivos programables ofrecen la ventaja de simular presencia mediante la activación y desactivación aleatoria, contribuyendo así a disuadir a posibles intrusos.
Qué hacer en caso de sufrir un robo en el hogar
Pese a todas las precauciones, si por desgracia una persona regresa a casa y comprueba que ha sido víctima de un robo, los pasos a seguir son esenciales para facilitar la labor policial y acelerar las investigaciones.
Lo primero es contactar inmediatamente con el número de emergencias para que agentes especializados acudan y confirmen la situación. Mientras se espera su llegada, es recomendable confeccionar una relación detallada de los objetos electrónicos sustraídos —como móviles, ordenadores, tabletas, televisores o consolas— incluyendo los números de serie. Esta información es vital para las fuerzas de seguridad y puede aumentar las probabilidades de recuperación.
Adicionalmente, conviene realizar una lista con fotografías de todos los objetos de valor y joyas existentes en el hogar. Registrar estas pertenencias permite presentar denuncias bien documentadas y mejorar el rastreo de las piezas robadas.
La importancia de las redes sociales en la seguridad doméstica
Un aspecto que suele pasarse por alto es el impacto de las publicaciones en redes sociales relacionadas con las ausencias. Mostrar abiertamente que la vivienda permanecerá vacía durante varios días o semanas sirve como un aviso no intencionado para personas malintencionadas.
Muchos expertos en seguridad aconsejan no compartir detalles sobre viajes o escapadas hasta haber regresado. Este simple precaución puede contribuir significativamente a evitar situaciones de riesgo, ya que la información pública sobre la ausencia facilita la planificación del delito.
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