En España, los periodos sin cotización no tienen por qué repercutir negativamente en la cuantía de la pensión siempre que se utilice el mecanismo conocido como integración de lagunas. Este procedimiento permite sumar hasta 48 meses sin trabajar para mejorar la base de cálculo de la pensión, aunque no computen como años reales de cotización.
La base reguladora, que determina el importe final de la prestación, se obtiene a partir de las bases de cotización de los últimos 25 años o 300 meses. Cuando el sistema detecta huecos en la vida laboral, como periodos sin actividad ni cotización, aplica una fórmula para evitar que esas interrupciones reduzcan drásticamente la pensión.
Este mecanismo, vigente en 2025, es especialmente valioso para aquellos que han tenido carreras profesionales irregulares o fragmentadas. El siguiente análisis explica cómo funciona en la práctica y quiénes pueden beneficiarse.
Funcionamiento de la integración de lagunas
Cuando un trabajador tiene periodos sin cotizar, el sistema recurre a un procedimiento escalonado para rellenar esos meses vacíos. En concreto, el cálculo emplea las siguientes bases para integrarlos:
- Los primeros 48 meses sin cotización se valoran con la base mínima vigente, que para 2025 está fijada en 1.323 euros mensuales.
- A partir del mes 49 sin cotizar, se aplica únicamente el 50% de esa base mínima.
De esta forma, la Seguridad Social busca suavizar el impacto de las lagunas. Aunque los meses añadidos de esta manera no equivalen a años efectivos trabajados, sí elevan la base reguladora y, por tanto, la cuantía final de la pensión.
A partir de 2026, además, se introducirán ampliaciones significativas para ciertos colectivos. Las mujeres que hayan sufrido interrupciones derivadas del cuidado de hijos podrán integrar hasta 60 meses al 100% de la base mínima y otros 24 meses al 80%, para después aplicar el 50%. Esta medida reconoce la dedicación familiar y su impacto en la carrera contributiva.
Quiénes se benefician de integrar lagunas en la cotización
Este sistema es especialmente relevante para trabajadores con trayectorias profesionales irregulares o que han vivido situaciones laborales adversas. Entre los grupos más destacados figuran:
- Personas con contratos temporales encadenados, cuyos periodos sin cotizar son frecuentes.
- Parados de larga duración que han tenido interrupciones prolongadas sin actividad.
- Padres y madres que interrumpieron su carrera profesional para cuidar a sus hijos, que verán ampliado su beneficio desde 2026.
- Trabajadores autónomos que cesaron su actividad y retomaron la cotización más tarde, gracias a mecanismos especiales con bases mínimas propias —alrededor de 960 euros.
Sin embargo, es importante recordar que, aunque las lagunas integradas elevan la base reguladora, no sustituyen los requisitos legales para acceder a la pensión. Se exige un mínimo de 15 años cotizados, con al menos dos años en los últimos 15.
Cómo consultar y mejorar la cotización para evitar lagunas
Para conocer si existen periodos sin cotización, cualquier trabajador en España puede consultar su vida laboral a través de la sede electrónica de la Seguridad Social. Este informe muestra el detalle de meses cotizados y las interrupciones detectadas.
Con esta información, se puede calcular el impacto que las lagunas tendrán sobre la pensión y valorar opciones para mejorarlo. Por ejemplo, mediante la suscripción de un convenio especial de cotización voluntaria, que permite completar meses en blanco y aumentar la futura prestación.
Detectar a tiempo estas lagunas es esencial para planificar correctamente la jubilación y evitar sorpresas desagradables al solicitar la pensión.