A día de hoy, muchos trabajadores podrían estar obligados a realizar turnos en fin de semana sin conocerlo al detalle. Así lo advierte Juanma Lorente, abogado especializado en derecho laboral, quien señala que esta situación es más común de lo que parece, especialmente para quienes acaban de iniciar una relación laboral y no han analizado minuciosamente su contrato. La realidad es que, aunque tu jornada habitual sea de lunes a viernes, existe la posibilidad de que la empresa te exija trabajar entre jueves y domingo. Esto se debe a la presencia de determinadas cláusulas contractuales que muchas veces pasan desapercibidas al momento de la firma.
La falta de revisión del contrato puede derivar en obligaciones inesperadas, puesto que la mayoría de quienes comienzan un empleo suelen aceptar sin protestar las condiciones formales que se les presentan, confiando en la explicación verbal facilitada en la entrevista o en la oferta laboral.
Cláusulas necesarias para entender la jornada laboral
Según explica Lorente, la cláusula clave se encuentra habitualmente en la tercera posición del contrato indefinido. En este apartado se detallan las condiciones relativas a la distribución de la jornada semanal de trabajo. Es decir, en este punto se especifica si la actividad laboral se desarrolla de lunes a viernes, de lunes a sábado o incluso abarca todos los días de la semana, domingo incluido. Lo que preocupa es que algunas empresas incluyen voluntariamente la opción de trabajar de lunes a domingo pese a que, previamente, en la entrevista o el proceso de selección, hayan asegurado que la contratación solo implica trabajar de lunes a viernes.
Este tipo de cláusulas permite a la empresa modificar la jornada semanal según sus necesidades sin informarte de forma clara al inicio. Por ejemplo, puede solicitarte que trabajes en fin de semana si la carga de trabajo lo exige, con el respaldo legal del contrato porque así lo has firmado sin reparo.
Importancia de la revisión exhaustiva del contrato
Para evitar sorpresas desagradables, es imprescindible que antes de firmar el contrato laboral se revise cada una de las cláusulas relacionadas con jornadas y turnos. No basta con confiar en lo que te hayan contado en la entrevista; es fundamental comprobar que la jornada semanal que aparece en el documento corresponde con lo pactado verbalmente. Si detectas que en tu contrato está estipulada una jornada que abarca hasta el domingo, y no te convence, lo mejor es negociar la modificación o buscar asesoramiento profesional antes de estampar tu firma.