Una de las mayores preocupaciones para los trabajadores beneficiarios de subsidios de desempleo es la incertidumbre que genera el comienzo de un nuevo empleo. En ese sentido, el proceso tradicional obligaba a comunicar el inicio de una actividad laboral para evitar perder el derecho a la prestación y, en muchos casos, provocaba la interrupción total de la ayuda económica. Sin embargo, en 2024, la normativa sufrió una modificación sustancial que ha cambiado el panorama para estos trabajadores.
Desde el 1 de noviembre de 2024, se implementó un sistema que permite compaginar el cobro de un subsidio con un trabajo remunerado, siempre y cuando el beneficiario cumpla ciertos requisitos. Esta medida contempla la concesión de un complemento económico adicional para incentivar la reincorporación rápida al mercado laboral, beneficiando especialmente a quienes encuentran empleo temporal o a tiempo parcial.
Fernando Maján, asesor de la subdirección de Prestaciones del SEPE, aclaró en el programa Madrid Trabaja de Onda Madrid que el complemento, denominado CAE (Complemento de Apoyo al Empleo), se activa de forma automática desde el momento en que el trabajador se coloca por cuenta ajena. Esto significa que el subsidio tradicional se suspende, pero el beneficiario empieza a recibir este complemento que se mantiene durante un máximo de 180 días.
Compatibilidad entre subsidios y empleo
Este nuevo esquema representa un cambio radical respecto al anterior, donde cualquier trabajo suponía la pérdida total del subsidio. La normativa actual permite que los beneficiarios cobren un porcentaje de la ayuda al mismo tiempo que perciben el salario del trabajo, ya sea a tiempo completo o parcial. Un elemento clave es que se premia la rapidez y el porcentaje de horas trabajadas, de manera que quienes se incorporen con más prontitud y en jornada más amplia recibirán una mayor cuantía del CAE.
Para contextualizar este sistema, es importante mencionar que en 2025 el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) está fijado en 600 euros mensuales. El monto del CAE oscila desde el 5% hasta el 80% del IPREM, es decir, entre 30 y 480 euros mensuales. Esta horquilla responde a distintos niveles de inserción laboral y se ajusta según el momento dentro del periodo del subsidio en el que se produce la contratación.
Duración y condiciones del nuevo complemento
El máximo periodo para percibir el CAE es de seis meses consecutivos desde la fecha de contratación. Transcurrido este plazo, si el trabajador continúa en activo, deberá hacerlo solo con su salario por empleo, ya que el complemento desaparecerá. Por el contrario, si pierde el empleo durante ese tiempo, podrá retomar el cobro del subsidio original, descontando los días en que recibió el CAE. Este sistema evita la pérdida de derechos adquiridos durante el tiempo trabajado bajo el complemento.
Maján también señaló en su intervención que la compatibilidad es automática, lo que agiliza los trámites para los beneficiarios y reduce la burocracia. Asimismo, recordó que quienes concluyan una etapa laboral inferior a 90 días pueden reanudar sin mayores dificultades la percepción total o parcial del subsidio, según corresponda.