El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha recibido este lunes en la Moncloa al líder del PP, Pablo Casado, en la primera ronda de contactos iniciada por jefe del Ejecutivo tras las elecciones generales.
Pasada la una de la tarde, Sánchez ha recibido a Casado en la parte de arriba de la escalinata del edificio del Consejo de Ministros, donde ambos, con traje azul oscuro, se han dado un apretón de manos con gesto sonriente.
Ya en el interior, Sánchez y Casado han accedido a la sala Tapies, presidida por una bandera de España, donde también han posado para los medios gráficos sentados en un sofá mientras intercambiaban algunos comentarios.
La reunión entre ambos es la primera de una ronda de contactos iniciada por el presidente y líder socialista tras las elecciones generales que dieron la victoria al PSOE con 123 diputados, muy por delante del PP, que con 66 escaños obtuvo el peor resultado de su historia.
Sánchez ha iniciado esta ronda, para abrir cauces de diálogo para la gobernabilidad y constatar la actitud de los partidos de cara a la investidura.
Así lo apuntan fuentes de Moncloa que han dicho a Efe que las citas de estos días se entienden como una toma de contacto y normalización de relaciones, y sostienen que para la ciudadanía es «un buen mensaje» tratar de superar las diferencias.
Esta ronda de contactos incluirá encuentros mañana con los líderes de Ciudadanos, Albert Rivera, y Podemos, Pablo Iglesias.
Pablo Casado ha estado esta mañana en un desayuno informativo junto a la candidata de su partido a la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, en el que ha afirmado que en su partido «no cabe ni el luto ni la resignación», tras los malos resultados del 28 de abril.
Casado ha considerado que en una semana los populares ya se han «sacudido el polvo» y se presentan decididos a la nueva cita electoral «con ansia de victoria».
Además, tras recordar que nunca pactará con el PSOE, ha reclamado a Ciudadanos que aclare con quién está dispuesto a pactar tras las elecciones municipales y autonómicas del 26 de mayo porque cree que sería «muy positivo» que se supiese su política de acuerdos.