Los líderes de la sublevación prorrusa en el sureste de Ucrania obtuvieron ayer una importante victoria en su pulso con el Gobierno de Kiev al conseguir celebrar sendos referendos separatistas en la regiones de Lugansk y Donetsk con activa participación ciudadana. Según los organizadores de las consultas, que Kiev y la comunidad internacional consideran ilegales, la participación en la región de Lugansk era de más del ochenta por ciento y en la Donetsk, del setenta.
«La participación ha superado todas nuestras expectativas. Estamos muy contentos», afirmó el jefe de la Comisión Electoral de la «República Popular de Donetsk», Román Liaguin, quien destacó la «gran respuesta ciudadana» a la convocatoria a las urnas. Hizo especial hincapié en que los ciudadanos acudieron a votar pese a la «situación de guerra» que se vive en varias localidades y ciudades de la región.
La mayor parte de la jornada transcurrió en una clima de relativa tranquilidad. Sin embargo, una persona murió en Krasnoarmeisk (Donetsk) y varias han resultado heridas en una aldea de la región rebelde ucraniana de Lugansk, cuando la población trataba de impedir la entrada de blindados del Ejército ucraniano, informó la agencia rusa Interfax.
Disparos
«En estos momentos, unos 1.500 habitantes impiden el paso de los blindados de la Guardia Nacional de Ucrania. Estoy escuchando disparos. Me han dicho que ya hay al menos dos heridos», dijo anoche el responsable del centro de prensa para el referéndum de Lugansk, Vasili Nikitin.
Por otra parte, en la ciudad de Krasnoarmeisk, en la región de Donetsk, una persona murió en un tiroteo junto a la sede de la administración regional, según confirmó Interfax.
Según el dirigente prorruso, «las formaciones militares (ucranianas) que sigan en el territorio serán reconocidas como ilegales y consideradas invasoras después del anuncio de los resultados oficiales del referéndum».
El Kiev, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania recalcó que las consultas organizadas por los separatistas no tendrán ninguna consecuencia jurídica ni tampoco afectarán la integridad territorial del Estado al tiempo que acusaba a Moscú de «organizar y financiar el referéndum.