Cuatro personas han sido detenidas tras los tiroteos en Nueva Zelanda registrados este viernes en el interior de dos mezquitas de la localidad de Christchurch, en los ha habido al menos 49 muertos y 20 heridos, según fuentes policiales. Nueva Zelanda ha elevado la alerta al máximo tras el ataque.
«Hay cuatro personas bajo custodia. No nos consta que haya más implicadas pero no podemos asumir que no haya más», dijo en rueda de prensa el jefe de la policía, Mike Bush, que evitó precisar el número de víctimas de esta masacre, pero lo calificó de «significativo».
El informante señaló que los detenidos en los tiroteos de Nueva Zelanda son tres hombres y una mujer, a los que encontraron artefactos explosivos en sus vehículos, y alertó sobre la posibilidad de que el incidente no esté limitado a la ciudad.
Imágenes divulgadas por la televisión mostraron a un hombre detenido al lado de un todoterreno blanco que fue embestido por un coche de la policía.
La Policía, que evitó hacer comentarios sobre las posibles motivaciones de los asaltantes de esta masacre, llamó a todas las mezquitas del país a cerrar las puertas y a recomendar a sus fieles que eviten las visitas a los centros.
Las dos mezquitas atacadas, situadas en dos céntricas avenidas de la ciudad, siguen acordonadas por la Policía que, en cambio, levantó la orden de confinamiento en todas las escuelas pese a considerar que el caso no está aun cerrado.
La primera ministra neozelandesa, Jacinda Ardern, afirmó que el asalto fue «un acto de violencia extraordinario y sin precedentes», en lo que calificó como «uno de los días más negros de Nueva Zelanda». «Este tipo de violencia no tiene ningún sentido en Nueva Zelanda. Esto no es lo que somos», dijo Ardern en rueda de prensa.
Uno de los tiroteos de Christchurch fue retransmitido en directo a través de las redes sociales por el asaltante, que aparece con ropa militar dentro del centro de culto disparando a bocajarro a varias personas con un arma automática de la que cambió el cargador al menos dos veces.
En las redes sociales también circula un manifiesto de los asaltantes que incluiría calificativos peyorativos contra los musulmanes.
«Es claramente un supremacista blanco que ha planeado esto durante dos años», dijo un analista en seguridad a la emisora Radio New Zeland.
Uno de los asaltantes de esta masacre fue identificado como Brenton Tarrant, un australiano originario del estado de Nueva Gales del Sur, según indicó una fuente policial australiana a la televisión TVNZ.
Varios testigos de los tiroteos en Nueva Zelanda indicaron que en el interior de una de las mezquitas había entre 300 y 500 personas.