Los talibanes aseguraron este lunes que sus combatientes lograron la conquista de la norteña provincia de Panjshir, la única de las 34 regiones afganas que no había caído en manos insurgentes, que permanecía defendida por las fuerzas de la resistencia.
«La última fortaleza del enemigo mercenario, la provincia de Panjshir, fue completamente conquistada», aseguró en un comunicado el principal portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid.
De acuerdo con el portavoz, «la provincia de Panjshir ha quedado bajo el control total del Emirato Islámico (como se autodenominan los talibanes)», después de intensos días de combates.
«Algunos de los rebeldes de la provincia fueron derrotados y el resto huyó, liberando al pueblo oprimido y honorable de Panjshir», añadió.
Panjshir era hasta ahora la única de las 34 provincias afganas que no había bajo el control de los islamistas, después de que el grupo capturara las 33 regiones restantes en menos de dos semanas, culminando el logro con la toma de Kabul el 15 de agosto.
«Con esta victoria y último esfuerzo, el resto del país estará completamente fuera de la guerra y tendrá una vida pacífica y próspera en un ambiente de libertad, independencia y prosperidad», concluyó el portavoz.
La provincia de Panjshir había resistido defendida por el Frente Nacional de Resistencia, formado por guerrillas locales y tropas del Gobierno afgano derrocado que se refugiaron en la región durante su retirada.
La resistencia ha estado dirigida por el exvicepresidente afgano, Amrullah Saleh, autoproclamado nuevo presidente de Afganistán tras la huida del país durante la toma de Kabul del exmandatario, Ashraf Ghani, y Ahmad Massoud, hijo del difunto comandante afgano Ahmad Shah Massoud, «el león del Panjshir», una leyenda por haber hecho frente a los soviéticos y a los talibanes.
Los combates se han intensificado en los últimos días después de que fallaran los intentos de diálogo de los fundamentalista y Ahmad Massoud para encontrar una salida al conflicto.
De momento, ni Ahmad Massoud ni Amrullah Saleh han confirmado su rendición o la caída de la provincia.
Panjshir también fue el centro de la resistencia contra el grupo islamista durante el anterior régimen talibán, entre 1996 y 2001, que concluyó con una invasión estadounidense que llegó precisamente esta semana a su fin tras casi dos décadas de guerra.