Las Fuerzas Armadas de Ucrania han acusado a las fuerzas rebeldes que controlan Donestk y Lugansk de cometer decenas de violaciones del alto el fuego en las últimas 24 horas, entre ellas algunas perpetradas después de que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, reconociese la independencia de ambas regiones. Sólo el jueves, el Ejército tuvo constancia de 84 violaciones. Las Fuerzas Armadas han asegurado en un comunicado que dos militares han muerto, mientras que otros doce han resultado heridos. Por su parte, las autoridades de la autoproclamada República Popular de Donetsk han denunciado este martes la muerte de tres civiles por una explosión causada por «saboteadores ucranianos» en una carretera que conecta Donetsk con Gorlovka.
El portavoz de las milicias de esta república autoproclamada, Eduard Basurin, ha asegurado que «saboteadores ucranianos detonaron un artefacto explosivo» en esta autopista«, según ha recogido la agencia rusa de noticias Sputnik. »Como resultado de este ataque terrorista, fallecieron tres civiles que viajaban en un vehículo por esta ruta", ha dicho Basurin. El jefe del Comité de Investigación de Rusia, Alexander Bastrikin, ha ordenado abrir una investigación sobre el suceso.
Putin reconoció el lunes la independencia de ambas regiones ucranianas y ordenó horas después la entrada de las Fuerzas Armadas rusas en las mismas en el marco de una «misión de mantenimiento de la paz», unas decisiones criticadas duramente por la mayoría de la comunidad internacional. El Gobierno ucraniano cifró el lunes en 14.000 los muertos en los ocho años de conflicto en el este del país, antes de agregar que al menos 30.000 personas han resultado heridas, mientras que 1,5 millones de personas se han visto obligadas a huir de sus hogares en Crimea y Donbás para escapar de «la ocupación» rusa del territorio de Ucrania.