EEUU y la UE, junto a gran Bretaña, han impuesto gradualmente unas severas sanciones tanto a Putin, como a su ministro de Asuntos Exteriores Serguei Lavrov, como a varios multimillonarios de la Kosher Roja y jerifaltes del antiguo KGB como así mismo también se le han cancelado las cuentas privadas al jefe del grupo mercenario Wagner. Todo ello en respuesta por la invasión de parte de Ucrania por las tropas dirigidas por el presidente ruso.
Como dijo Joe Biden, vamos a convertir a Putin en un paria, al igual que hicimos con Gadaffi o con Sadam Hussein. Pero aquí, intuyo yo, van a pinchar en hueso los sabios de la cosa esta de asuntos bancarios de Londres, expertos en arruinarnos la vida a los simples mortales, menos a Putin, que está por encima del bien y del mal.
Putin de niño conoció la miseria y tener que cazar ratas, pero actualmente es uno de los hombres más ricos del planeta; posee varias dachas y palacios en lugares estratégicos y suele ir a cazar a Siberia, junto al valle donde se encuentra la montaña llamada Putin en honor a tan alto mandatario. Su joya de la corona es el palacio en el cabo Idokopas, a orillas del Mar Negro. Con un coste de más de 1.000 millones de dólares, al cambio, pues Putin no vive en el Kremlim, sino en un palacete a veinte y tres kilómetros de Moscú llamado Novo-Ogariovo, al oeste de Moscú. Su despacho si está situado en el Kremlim, aunque hay otros lugares secretos por toda Rusia.
Intentar convertir a Putin en un 'paria' como dice Biden, no va a ser una tarea fácil. Mala forma de intentar un diálogo si le cierran la entrada a EEUU y le imposibilitan la oportunidad de entablar diálogos tanto en París, Bélgica o Alemania. Es como querer poner puertas al campo, y si , eso sí, pueden a través de la manipulación de los medios intentar destruir la imagen de Putin como hombre de Estado, que lo es, pues sin él Rusia caería en el caos y la revolución de sus territorios. Si, pueden convertir en un paria a Putin como persona, pero su riqueza no será tan fácil de desmoronar. Vamos, que no le veremos pidiendo limosna en el Bowery de Nueva York ni bajo un puente en Brooklyn.
Parte de los 23 oligarcas rusos amigos de Putin y algunos exKGB, se hicieron multimillonarios, es por eso que, tras la caída de la Bolsa de Moscú hace unos años, éstos amparándose en familiares directos como testaferros, pasaron sus fortunas en las nuevas monedas, la criptomonedas. Estos ciudadanos poseen 190.920 millones de euros en criptomonedas, de difícil control por el Banco Mundial. Es una de las maneras en las que los oligarcas rusos protegen sus fortunas ante la posibilidad de posibles represalias.
EEUU en primer lugar, junto a Gran Bretaña y los países como Australia o la Unión Europea han empezado ya a intervenir en sus cuentas, con duras sanciones para bloquear el flujo comercial de Rusia en el exterior. Putin posee una gran fortuna estimada en más de 1.000 millones de euros, gran parte de ella en oro, de difícil seguimiento y con el cual, al contar él con estas futuras represalias, mantiene a buen recaudo con la ayuda de países como China, Venezuela o Irán, que están, de momento, financiando esta guerra con Ucrania que Putin quiere dejar zanjada en pocas semanas. Conociendo a Putin, que no da puntada sin hilo, lo debe tener todo calculado. En mi humilde opinión, Putin me ha defraudado al ver que, su legendaria paciencia y frialdad, se ha desbordado y no es precisamente EEUU ni la UE ni Gran Bretaña, quienes están quitando hierro al asunto. Este endurecimiento no va solo en detrimento de Putin y sus gerifaltes, sino que afecta a todo el pueblo ruso, inocente total en este conflicto como lo es también el sufrido pueblo ucraniano. Se le ha prohibido poder entrar en los EEUU y viajar a otros países, con lo cual, la posibilidad de diálogo es nula y cierra las puertas a una solución que nos llevará directamente a la III Guerra Mundial.
Un gran negocio de los de siempre, más de 1.000 millones de dólares en armamento, más de 300 millones para armar a Ucrania...es un diálogo de sordos por el empecinamiento tanto de Biden como de Putin , éste último convencido de que todo lo está haciendo para librar a Rusia de la nefasta influencia americana y que nada tiene que ver con la forma de pensar y sentir del pueblo ruso.
Biden se equivoca. Este hombre piensa a la antigua, no con una mentalidad moderna pues la Rusia actual nada tiene que ver con la extinta Unión Soviética. Rusia lleva 20 años de adelanto a EEUU en la creación de misiles hipersónicos y de armas que ni imaginamos. El presidente ruso lo dijo bien claro: «todo aquel que se meta en este conflicto y perjudique a Rusia, conocerá como jamás ha vivido, la respuesta armada de una forma inimaginable». Y Pedro Sánchez, nos ha metido por culpa de su ego, en una guerra que nos producirá mucho más dolor que satisfacciones.
Con estas represalias económicas quieren que los que sostienen a Putin, le retiren su apoyo, desde los oligarcas de la Kosher Roja, pasando por los millonarios gracias a su cercanía al presidente hasta llegar a las fuerzas armadas. Que poco conocen al pueblo ruso! Cometerán el mismo error que cometieron en Vietnam, Irak, Libia o creando la falsa Primavera Árabe. Putin no acabará siendo un paria al estilo Saddam Hussein, bien al contrario. Y América no posee ahora- lo demostró en el fiasco de Afganistán- la fuerza militar para luchar en tres frentes distintos, Rusia, China e Irán.
El odio irá creciendo en el pueblo ruso hacia EEUU cuando éste sepa que se han prohibido los espectáculos de Ballet o coros rusos como los del teatro Bolshoi que suele dar gira por todo el mundo. ¿Qué culpa tienen los artistas de la situación política? Todo esto está mal enfocado y si, convertirán a Putin en un paria en cuanto a imagen, en realidad, pueden convertirnos a todos en parias si quisieran con la complicidad de los medios de comunicación, pero lo que no podrán evitar es una guerra de inusitados resultados a los que las generaciones actuales no están acostumbradas. Dudo que la salud de Biden resista y pueda ver el final de esta tragedia, y seguro volverá Trump a la presidencia ya que tienen un pacto secreto con Putin a quien tiene que agradecer su triunfo en las elecciones que le convirtieron en presidente.
Ahora lo más urgente para mí es apoyar al pueblo ucraniano y dar toda nuestra sincera acogida a los refugiados y desplazados. Polonia ha sido un claro ejemplo de pueblo solidario. Pronto veremos atacada Finlandia y Suecia....al tiempo. Yo de Joe Biden habría tratado con más respeto a Putin, en cambio él le ha llamado antes de lo de Ucrania asesino y ahora, paria. Veremos. Pero Julio César se distinguió por respetar y hasta perdonar a sus enemigos en combate. Hoy son días de guerra sucia en un mundo cada vez más sucio. Qué Dios les perdone porque no saben lo que hacen.