Los civiles fallecidos desde el inicio de la guerra en Ucrania el 24 de febrero superaron en los últimos días la barrera de los 5.000, según las estadísticas que actualiza periódicamente la Oficina de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Los fallecidos confirmados por esta oficina hoy ascienden a 5.024, entre ellos 343 menores de edad, mientras que otros 11.544 civiles resultaron heridos, de los cuales al menos 357 eran niños o niñas, indicó la institución en un comunicado.
La oficina que dirige hasta finales de agosto la alta comisionada Michelle Bachelet reiteró que las cifras reales de víctimas civiles podrían ser mayores que las por ahora confirmadas, dada la falta de acceso aún a datos en zonas de fuertes enfrentamientos, que incluyen Mariúpol, Izium y Severodonetsk. Más de la mitad de estas víctimas civiles se registraron en el mes de marzo (3.046), y desde entonces el número se ha ido reduciendo progresivamente (665 en abril, 456 en mayo, 362 en junio y 159 en los primeros once días de julio).
La mayoría de estas víctimas civiles fallecieron por artefactos explosivos con amplia área de impacto, incluyendo bombardeos aéreos, de artillería pesada, con misiles y sistemas multilanzamiento de cohetes, señaló la oficina de Naciones Unidas.