La primera dama de Kenia, Rachel Ruto, ha hecho un llamamiento a la celebración de rezos a nivel nacional contra la homosexualidad y ha recalcado que «la familia se ha convertido en una institución atacada», después de que el presidente keniano, William Ruto, recalcara que las autoridades «no permitirán los matrimonios entre personas del mismo sexo». «Queremos fortalecer la institución de la familia, en la que hay un padre, una madre e hijos. Las ideas LGBTQ están prohibidas incluso en la Biblia y la cultura africana. Mantengamos los valores familiares», ha manifestado, antes de recalcar que «como gente que ama rezar y que llegó al gobierno a través de los rezos, no se puede decir que no se rezará ante lo que está pasando».
«Me gustaría que rezáramos sobre asuntos de familia», ha reseñado, al tiempo que ha manifestado que «si la madre y el padre no están juntos de forma pacífica, los hijos tendrán problemas». «Por eso seguiremos junto a las familias a través de los rezos y visitando escuelas para difundir la palabra de Dios», ha indicado, según ha informado el diario keniano The Star. Por último, la primera dama keniana ha hecho hincapié en que «ni siquiera habría que intentar hablar sobre LGBTQ, porque es una conversación que no habría que tener en este país», tal y como ha recogido el diario People Daily. «Aceptarla es como tirar nuestros valores morales a la basura», ha apostillado.
El mandatario keniano rechazó la semana pasada el reciente fallo del Tribunal Supremo que da a los miembro de la comunidad LGBTI+ derecho a formar agrupaciones en el país y dijo que, si bien ha prometido respetar los fallos judiciales, en este caso es diferente. «No a este fallo. No lo aceptaremos. Nos aferraremos a nuestra cultura y nuestras tradiciones. No permitiremos los matrimonios entre personas del mismo sexo», recalcó. «No podemos salir a las calles a pedir que se les permita casarse. Esto pasa en otras partes, pero no en Kenia», dijo.
«Aseguro a las mujeres que no permitiremos que otras mujeres sean competencia y lo mismo en la otra dirección. Si los hombres se quedan con los hombres, ¿de dónde sacarán marido las mujeres?», se preguntó, una postura respaldada por el principal líder opositor, Raila Odinga. El Tribunal Supremo de Kenia desestimó la decisión del Gobierno de impedir el registro en 2013 de una ONG a favor de los derechos de la comunidad LGTBI y avaló ahora su inclusión por considerar que el colectivo tiene derecho a asociarse y organizarse. El tribunal se pronunció así en contra de la decisión de rechazar el registro por considerar que se trata de una medida discriminatoria, si bien falló que la homosexualidad sigue siendo ilegal en el país, cuyo Código Penal contempla penas de hasta catorce años de cárceles por actos homosexuales.