El papa Francisco recordó a las madres de los soldados ucranianos y rusos, caídos en la guerra, «son madres de hijos muertos, recemos por estas madres», dijo, durante la audiencia general celebrada en la Plaza de San Pedro. Francisco se refirió «a todas las víctimas de los crímenes de guerra» y pidió a Dios «que se conviertan los corazones de todos».
«Y no olvidemos rezar por los mártires ucranianos», concluyó, en sus llamamientos finales. Pero también agregó: «Mi pensamiento va a las madres de los soldados ucranianos y rusos caídos en la guerra, son madres de hijos muertos, recemos por estas madres».
En una reciente entrevista a los medios vaticanos, el papa había declarado: «Me duele ver a los chicos muertos, tanto rusos como ucranianos, no me importa, me duele que no regresen». Mientras que en el ángelus del 19 de marzo, el papa pidió de nuevo rezar «por el martirizado pueblo ucraniano que sigue sufriendo los crímenes de la guerra».
... por un lado tenemos a un líder espiritual al que siguen millones de personas, del brazo de un sátrapa como es el dictador ruso, bendiciendo la agresión militar y dando consuelo pero también arengas a los devotos soldados rusos, el pope ultraortodoxo Kiril... y por el otro lado tenemos la otra copia idéntica del espejo, otro líder espiritual al que siguen millones de personas, rezando por las víctimas del otro lado, el agredido pueblo ucraniano, a los que denomina mártires... en religión, hemos podido comprobar a lo largo de la historia, que las confesiones religiosas siempre se arriman a la sombra que mejor les cobija, participando con sus pases mágicos a beneficio de quien más les conviene o les sean más próximos... debería dar que pensar a los fieles... si no hay un dios universal, sino varios dioses que reparten sus prebendas a unos o a otros en función de los muy humanos sentimientos de pertenencia, es que todo es una gran mise en scène... En fin, al menos el papa del bando de los occidentales ha deseado que la gente rece (inútil) por los DOS montones de pérdidas humanas, los fanáticos devotos rusos y los fanáticos devotos ucranianos, que van ambos a la guerra con el mismo supuesto dios de su lado, punto para el papa porteño... pero, siempre hay un pero, aprovechar ese tema para "pedir la conversión de todas las víctimas", como que todos van a ir al mismo sitio, al mismo saco, a la misma fosa, y que ese dios aprovechará para robarles sus conciencias, como que me suena a un penoso intento apologético falto de delicadeza... las personas primero, informemos a los combatientes de por qué van realmente a la guerra, que no es por mandato divino, ni tampoco habrá 72 vírgenes ni tal... la guerra es un sinsentido, pero que se aproveche de ella la religión, una burla...