Las autoridades de Bali han deportado a un turista ruso que posó desnudo, de cintura para abajo, en una fotografía frente al monte Agung, considerado sagrado en la isla indonesia donde el hinduismo en la religión mayoritaria, al considerar que cometió un «acto deshonroso». «La deportación se ha llevado a cabo porque (el turista ruso) ha cometido un acto deshonroso, bajándose deliberadamente sus pantalones y mostrando sus genitales frente al monte Agung», asegura hoy en un comunicado el gobernador de Bali, Wayan Koster.
El turista fue deportado el martes a Rusia en un vuelo de Emirates con ruta Bali-Dubai-Domodedovo, señala por su parte la Oficina de Inmigración balinesa en una nota, en la que advierte a los visitantes: «Disfrutad de la belleza de Bali, pero si infringís las reglas no dudaremos en tomar medidas severas».
La deportación del ciudadano ruso, que responde a las siglas E.C. y se fotografió frente al monte sagrado -el punto más alto de la isla- el 18 de marzo, imagen que después se hizo viral en las redes sociales, sucede en plena campaña local contra las prácticas incívicas de los visitantes extranjeros. «Si hay comportamientos que no van en línea con las normas locales o nacionales, y con la cultura balinesa en particular (...), se tomarán medidas firmes», advierte el gobernador en el comunicado.
Antes de su deportación, captada en fotografías y vídeos por la Oficina de Inmigración de Bali, el viajero ruso tuvo que participar en una ceremonia de purificación en la isla, excepción hindú en Indonesia, el país con más musulmanes del mundo. Con su repatriación ya son 72 los viajeros extranjeros deportados desde Bali desde enero, 20 de ellos rusos, según confirmaron hoy a EFE fuentes de inmigración de la isla.
Las deportaciones suceden a otras medidas recientes decididas por Bali para controlar a los turistas, como prohibir que circulen solos en motocicletas, tras varios accidentes con turistas involucrados, entre ellos rusos. Las autoridades balinesas han pedido asimismo al Gobierno que estudie revocar el visado de llegada a los turistas rusos y ucranianos, denunciando que la situación bélica ha propiciado que ciudadanos de dichas nacionalidades trabajen en Bali ilegalmente.
El número de turistas rusos en Bali ha ido en auge y fueron la segunda nacionalidad -tras la australiana- con mayor volumen de visitantes, por encima de 22.000, en enero, casi un 13 % más de entradas que el mes anterior, según las últimas cifras de la Oficina de Turismo de Bali. Rusia y Ucrania se encuentran actualmente entre los 86 países cuyos ciudadanos todavía pueden solicitar el visado a su llegada a Bali.