El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha hecho este miércoles «directamente responsable» a Israel de la «masacre» en un hospital de la Franja de Gaza, donde el martes murieron alrededor de 500 personas, según el balance facilitado por las autoridades gazatíes. «La ocupación es directamente responsable de la masacre en el Hospital Baptista y sus flagrantes mentiras no engañan a nadie», ha dicho el grupo islamista, después de que el Ejército de Israel se haya distanciado del suceso y lo haya atribuido a un proyectil disparado por Yihad Islámica. Así, ha hecho hincapié en que «la ocupación amenazó al Hospital Baptista, bombardeó 22 ambulancias y mató a más de 25 doctores y sus familias», según ha informado el diario palestino 'Filastin', vinculado a Hamás, a través de su cuenta en Telegram.
En este sentido, Osama Hamdan, un alto cargo de Hamás, ha recalcado que lo sucedido «es una de las masacres más horribles cometidas en la era moderna» y ha resaltado que la milicia «hace totalmente responsable a la Administración estadounidense y a los países occidentales» por lo sucedido, debido a su apoyo a Israel. Las autoridades de Gaza, controlada por Hamás, y la Autoridad Palestina han acusado a Israel de bombardear el hospital, en el que había miles de pacientes, familiares y refugiados, mientras que Israel ha dicho que el centro fue alcanzado por un proyectil disparado por Yihad Islámica.
Por su parte, los países de la región han sido unánimes en su condena a Israel por su papel en lo sucedido. Naciones Unidas y numerosas organizaciones no gubernamentales han alertado del grave deterioro de la situación humanitaria en el enclave a causa de los bombardeos de Israel y el cerco impuesto tras los ataques de Hamás, que se saldaron con cerca de 1.400 muertos y unos 200 secuestrados. Las autoridades palestinas han cifrado en cerca de 3.500 los muertos por los bombardeos israelíes contra la Franja de Gaza.
El Ministerio de Sanidad de la Franja de Gaza ha afirmado que el ataque perpetrado el martes sobre el hospital Al Ahli ha provocado al menos 471 fallecidos, una matización de las cifras que coincide con el cruce de acusaciones entre milicianos palestinos y fuerzas israelíes.
Un portavoz ministerial ha confirmado asimismo más de 300 heridos, de los cuales unos 30 permanecían este miércoles en estado crítico, según declaraciones difundidas por el departamento y en las que este responsable denuncia la «limpieza étnica» perpetrada por Israel sobre la Franja. A nivel general, la ofensiva israelí sobre el territorio costero se ha saldado ya con 3.478 fallecidos y 12.065. Además, habría unas 1.300 personas desaparecidas. El 70 por ciento de las víctimas serían niños, mujeres y ancianos, según el Ministerio de Sanidad gazatí, controlado por Hamás.