Israel se prepara para este 2024 con «un presupuesto de guerra» que aumentará los gastos de necesidad bélica ante el conflicto con Hamás en Gaza y la escalada regional, anunció hoy el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, antes de una reunión de Gabinete para votar una enmienda al plan presupuestario.
Netanyahu reafirmó que la ofensiva para desmantelar al grupo islamista en la Franja «aún llevará muchos meses», por lo que hoy se presentó ante el Gabinete ministerial lo que definió como «un presupuesto de guerra», informó su oficina en un comunicado. «Si bien este presupuesto es un presupuesto anual», también lo es «para un año en el que estamos en guerra», enfatizó Netanyahu. «Esto requiere que incurramos en gastos de seguridad mucho mayores de los que planeábamos», agregó el mandatario.
Mientras se cumplen hoy cien días de guerra con Hamás tras el ataque del grupo islamista del 7 de octubre, «en este momento lo que se necesita es, en primer lugar, cubrir los gastos de guerra». La meta, añadió, es dar a Israel los recursos para seguir librando el conflicto hasta concluir con «la eliminación de Hamás» en Gaza, «la devolución de los rehenes» que siguen en la Franja y «el restablecimiento de seguridad en el norte y el sur» de Israel, para que las decenas de miles de residentes evacuados ante la escalada de violencia regional «puedan regresar a sus hogares».
Netanyahu dijo que entre los gastos añadidos a la revisión del presupuesto de este año hay ayudas económicas y compensaciones para los alrededor de 360.000 reservistas que fueron movilizados. Se contemplan también partidas para reconstruir las comunidades y kibutz -granjas colectivas- que fueron destruidas o gravemente dañadas durante el ataque de Hamás del 7 de octubre, y se prevé destinar más dinero «para el regreso de los evacuados».