El número de soldados turcos muertos en el norte de Irak a causa de inhalación de metano durante una operación en una cueva supuestamente usada por el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) ha aumentado a doce, según han confirmado las autoridades del país euroasiático. El Ministerio de Defensa turco informó el domingo en un inicio de cinco fallecidos, si bien ha agregado este lunes que otros siete «heroicos camaradas» han muerto en las últimas horas tras verse afectados por la inhalación de metano.
«El número de personal caído mártir ha aumentado a doce», ha señalado. Asimismo, ha expresado sus condolencias a los familiares de los fallecidos y ha mostrado su deseo de que los heridos se recuperen cuanto antes tras la operación, lanzada para intentar hallar el cuerpo de un soldado turco muerto durante una operación en 2022 contra el PKK en la zona. Las fuerzas turcas mantienen decenas de posiciones en la región del Kurdistán, en el norte de Irak, donde el PKK tiene una mayor presencia. En este contexto, ha lanzado decenas de ataques aéreos y operaciones terrestres durante años contra los miembros de la organización, que anunció en mayo su disolución tras más de cuatro décadas de guerrilla, un proceso que aún debe materializarse.
El mismo ministerio había informado de que cinco militares habían muerto tras verse expuestos a emisiones de gas metano en una cueva en la que se habían adentrado junto a otros 14 soldados para recuperar el cuerpo de un teniente muerto en 2022, y que el resto del equipo había sido hospitalizado, también con síntomas de intoxicación.
El suceso se produjo al patrullar una unidad militar turca un terreno montañoso en una franja fronteriza con Turquía en el norte de Irak que ha servido durante años de retaguardia al proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda de Turquía.
En mayo de 2022 se había producido un tiroteo en esta zona entre militares turcos y combatientes del PKK en el curso del cual murió un teniente turco, sin que se pudiera recuperar su cuerpo. Pese a tomar el Ejército turco más tarde el control de la zona, el cadáver no se había podido localizar hasta ayer, 6 de julio. El 1 de marzo pasado, el PKK anunció un alto el fuego y su intención de dejar las armas y el 12 de mayo pasado, la guerrilla proclamó su disolución tras celebrar un congreso, sin exigir contrapartidas concretas a Ankara.
Según la prensa turca, el PKK celebrará en los próximos días una ceremonia simbólica en Duhok, en el norte del Kurdistán iraquí, en la que un número limitado de combatientes entregará públicamente las armas. Se espera que el presidente turco, el islamista Recep Tayyip Erdogan, reciba hoy a una delegación de diputados del prokurdo Partido por la Igualdad y la Democracia de los Pueblos (DEM), la formación que ha mediado con el encarcelado líder y fundador del PKK, Abdullah Öcalan, para lanzar este proceso de paz y desarme de la guerrilla.