El ultraderechista José Antonio Kast se alzó con la victoria en las elecciones presidenciales de Chile el pasado domingo derrotando con una amplia ventaja a la candidata izquierdista Jeannette Jara. Este resultado confirmó las previsiones que anticipaban un triunfo holgado para el aspirante de la derecha. El exdiputado ultracatólico, de cincuenta y nueve años, obtuvo el 58,61 % de los sufragios, frente al 41,39 % conseguido por la exministra de Gabriel Boric, de cincuenta y un años.
La contundente victoria de Kast se extendió por todo el territorio nacional, imponiéndose en las dieciséis regiones del país. Esto incluye plazas tradicionalmente asociadas a la izquierda, como Valparaíso y la Región Metropolitana, donde se ubica la capital. Asimismo, el candidato republicano cosechó un apoyo masivo en las importantes zonas mineras del norte y en las regiones agrícolas del sur de Chile, demostrando una transversalidad en cierta medida inesperada en el electorado.
La trayectoria personal y familiar de José Antonio Kast ha suscitado un considerable interés. Hijo de un inmigrante alemán que estableció una numerosa familia en su nueva patria americana, su hermano mayor fue uno de los más influyentes Chicago Boys. Este último, además, desempeñó un papel crucial como artífice y ministro económico durante el régimen del dictador Augusto Pinochet. Tal y como han señalado recientemente diversas voces internacionales, la figura de Kast no busca una mera refundación del pinochetismo; más bien, su emergencia se entiende desde el propio ecosistema político que, con autocracia y nacionalcatolicismo, gobernó la nación chilena en el último tramo del siglo XX.
¿Quién es José Antonio Kast? Un perfil del nuevo presidente chileno
José Antonio Kast Rist, nacido en Santiago de Chile el 18 de enero de 1966, es un abogado y político chileno que ha marcado un hito en la historia reciente del país al convertirse en su nuevo presidente. Antes de su ascenso a la primera magistratura, Kast forjó una dilatada carrera en el ámbito legislativo, sirviendo como diputado por el distrito 23 entre 2002 y 2018. Durante su etapa parlamentaria, se destacó por su firme postura conservadora y su defensa de principios ultracatólicos, lo que le valió el reconocimiento de un sector del electorado.
En 2019, fundó el Partido Republicano, una formación política que ha logrado consolidarse como una fuerza relevante en el panorama político chileno, aglutinando a votantes de derecha y ultraderecha. Su discurso se ha centrado en la seguridad ciudadana, la defensa de la familia tradicional y una economía de libre mercado, resonando con una parte significativa de la población que busca un cambio de rumbo en el país.
El legado de los Chicago Boys y su vínculo con la familia Kast
La mención a los Chicago Boys es fundamental para comprender parte del contexto político y económico que rodea a la figura de José Antonio Kast. Estos fueron un grupo de economistas chilenos, la mayoría formados en la Pontificia Universidad Católica de Chile y posteriormente en la Universidad de Chicago bajo la influencia de Milton Friedman, que implementaron reformas económicas de libre mercado en Chile durante la dictadura de Augusto Pinochet. Su ideología se basaba en la reducción del gasto público, la privatización de empresas estatales y la apertura comercial, transformando radicalmente la economía chilena.
Jaime Guzmán, hermano mayor de José Antonio Kast, fue una figura prominente dentro de este grupo, ejerciendo como ministro de Planificación y siendo uno de los principales arquitectos de la política económica del régimen militar. Su influencia fue decisiva en la configuración del modelo económico chileno que perdura, con matices, hasta la actualidad. Este vínculo familiar directo con una etapa tan controvertida de la historia chilena constituye una parte indispensable para analizar la figura de Kast y su proyecto político.
Las claves de una victoria contundente
La victoria de José Antonio Kast en las elecciones presidenciales no solo fue amplia, sino también geográficamente extendida, lo que sugiere un cambio significativo en el mapa político chileno. El hecho de haber ganado en las dieciséis regiones del país, incluyendo bastiones históricos de la izquierda como Valparaíso y la Región Metropolitana, indica un descontento generalizado con las políticas progresistas y una búsqueda de alternativas más conservadoras.
La campaña de Kast supo capitalizar la preocupación ciudadana por la seguridad, la economía y la estabilidad institucional. Su discurso directo y su promesa de «orden y progreso» resonaron en un electorado que, tras años de polarización y estallidos sociales, parecía anhelar una mano firme en la dirección del país. La candidata izquierdista, Jeannette Jara, exministra del gobierno de Gabriel Boric, no logró movilizar a su base electoral de la misma manera, y su propuesta, aunque centrada en la justicia social, no consiguió contrarrestar el impulso del candidato republicano.
Desafíos y perspectivas para el gobierno de Kast en Chile
El nuevo gobierno de José Antonio Kast, que asumirá sus funciones a principios de este 2026, se enfrenta a un panorama complejo y lleno de desafíos. En el ámbito económico, la inflación y la desaceleración del crecimiento serán prioridades ineludibles. Kast ha prometido una agenda de liberalización económica y reducción del tamaño del Estado, lo que podría generar tensiones con los sectores más proteccionistas y los sindicatos.
En materia de seguridad, su propuesta de «mano dura» contra la delincuencia y el crimen organizado será puesta a prueba, con la expectativa de resultados rápidos por parte de la ciudadanía. Además, el presidente electo deberá navegar un Congreso fragmentado, donde la capacidad de construir consensos será crucial para la gobernabilidad. La polarización política, lejos de desaparecer, podría acentuarse, y la habilidad de Kast para tender puentes y dialogar con la oposición determinará en gran medida el éxito de su mandato. Las expectativas son altas, y la mirada de la región estará puesta en cómo Chile aborda esta nueva etapa política.
Reacciones y análisis tras los comicios presidenciales
La victoria de José Antonio Kast generó diversas reacciones tanto a nivel nacional como internacional. En Chile, los resultados fueron recibidos con alivio por parte de los sectores conservadores y empresariales, que ven en Kast una garantía de estabilidad y un freno a las reformas más ambiciosas de la izquierda.
Por otro lado, los sectores progresistas y de izquierda expresaron su preocupación por el giro conservador del país, advirtiendo sobre posibles retrocesos en derechos sociales y libertades. A nivel internacional, la prensa y los analistas políticos destacan el ascenso de la ultraderecha en un país que, hasta hace poco, era considerado un referente de estabilidad democrática en América del Sur. Se observó con interés cómo el discurso de Kast, centrado en el orden, la seguridad y los valores tradicionales, logró conectar con un electorado cansado de la incertidumbre. Cabe aguardar a cómo se posiciona el nuevo Chile de Kast en el actual escenario global, especialmente en temas como el comercio, los derechos humanos y la integración regional.
Ahora toca trabajar despiojando el país