Las fuerzas de seguridad cubanas agredieron ayer a unas cuarenta Damas de Blanco --esposas y familiares de presos políticos-- mientras realizaban una marcha en La Habana y, posteriormente, las llevaron a la fuerza a dos autobuses que las trasladaron a la sede de la organización.
"Las golpearon, las arrastraron y se las llevaron por la fuerza a dos ómnibus que tenían preparados la Policía política que reprimió esta manifestación", relató a Europa Press Carlos Serpa Maceira, director de la Unión de Periodistas Libres de Cuba, no reconocida por el Gobierno.
Entre las mujeres que fueron golpeadas se encuentra Laura Pollán --líder de las Damas de Blanco-- y Reyna Luisa Tamayo, madre del disidente fallecido en huelga de hambre Orlando Zapata, quien tuvo que ser trasladada a un hospital de La Habana a recibir atención médica, según confirmaron a Europa Press personas cercanas a la familia.
Pollán tiene una lesión en un dedo "que no sabe si fue una fractura" por la cual tuvo que recibir atención médica, dijo a Europa Press el titular de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), Elizardo Sánchez.
Unos 200 efectivos de las "turbas gubernamentales" se encontraban en los alrededores de las calles donde las mujeres realizaban la marcha que tenía como destino la vivienda de Orlando Fundora Álvarez, preso político que fue liberado a través de una licencia extrapenal, comentó Serpa Maceira.
Las mujeres, comentó el periodista independiente, fueron trasladadas en dos autobuses hasta la sede de las Damas de Blanco "bajo una fuerte custodia policial" que atravesó las principales calles de La Habana, mientras las opositoras "gritaban que estaban siendo secuestradas" por la Policía cubana.
La calle donde está ubicada la organización "se encontraba cerrada" por "efectivos militares" que al ver llegar a las reconocidas opositoras comenzaron a lanzar consignas como ¡Viva Fidel, viva la revolución!, dijo Serpa Maceira quien también fue golpeado por policías que además re rompieron su cámara fotográfica.
Sánchez, por su parte, explicó que las mujeres fueron "víctimas de una detención arbitraria" por parte de la Policía política secreta, "que es el gobierno paralelo en Cuba", además de haberse cometido una "violación flagrante al derecho de manifestación".
Los hechos ocurrieron en el tercer día de manifestaciones de estas mujeres que conmemoran los 7 años de la Primavera Negra, una ola represiva en la que el régimen castrista detuvo a 75 intelectuales y periodistas opositores.