El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, consideró ayer que el actual nivel de tipos en la zona euro resulta "apropiado" en el contexto de una recuperación económica "irregular" que tiene lugar a un ritmo "moderado" y expresó su confianza en la capacidad de Grecia de afrontar sus desafíos financieros al afirmar que la posibilidad de una suspensión de pagos del país heleno "no es una posibilidad".
El BCE mantuvo los tipos en el 1 por ciento y el máximo responsable de política monetaria de la eurozona volvió a utilizar el término "apropiado" al referirse al precio del dinero en la zona euro, lo que apunta a que la institución emisora no se plantea modificar su actual política monetaria.
Trichet, subrayó en una crispada rueda de prensa que la suspensión de pagos de Grecia "no es una posibilidad" a tener en cuenta de acuerdo con la información disponible y expresó su apoyo al compromiso de los gobiernos de la eurozona de prestar apoyo al país heleno si fuera necesario en colaboración con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El banquero galo hizo hincapié en que la activación de los préstamos bilaterales contemplados en dicho acuerdo del Eurogrupo, es responsabilidad de los gobiernos.