Argentina contestará el lunes a las quejas del Reino Unido por los controles que aplica a la navegación en torno a las Malvinas como represalia por la decisión británica de explorar hidrocarburos en esas islas, cuya soberanía se disputan ambos países desde 1833, informaron hoy fuentes diplomáticas.
La embajadora británica en Buenos Aires, Shan Morgan, fue citada por el canciller argentino, Jorge Taiana, a una reunión en la que responderá a la "queja verbal" difundida la semana pasada por el Gobierno de Londres, declararon a Efe las fuentes.
Hace tres meses, Argentina puso en marcha estrictos controles en la navegación dentro de su jurisdicción en el océano Atlántico sur después de que el Reino Unido autorizara la búsqueda de hidrocarburos en torno a las Malvinas, situadas a 400 millas marinas al este de las costas del país sudamericano.
El vicecanciller argentino, Victorio Taccetti, dijo el viernes que las quejas del Reino Unido "son más de lo mismo, las de alguien que se niega a toda conversación" para negociar la soberanía de las islas.
Destacó que el Reino Unido tomó una medida "unilateral" que viola antiguas resoluciones de las Naciones Unidas que llaman a las partes a negociar la cuestión de soberanía de las Malvinas, a las que consideró un enclave colonial británico.
Taccetti remarcó, además, que el hecho de que se haya comprobado la existencia de petróleo en torno a las islas "no facilita" una solución al conflicto.
"Si la defensa de las islas es simplemente una cuestión de prestigio y les cuesta dinero a los británicos, se les hace más complicado", pero si en cambio "son fuente de ingreso van a tener más entusiasmo en defenderlas", advirtió en declaraciones a radios locales.
El jueves, Morgan encabezó un acto en la embajada del Reino Unido para brindar por el Bicentenario de la Revolución de Mayo, que el 25 de mayo de 1810 dio paso a la independencia de Argentina, ocasión en la que remarcó que el Gobierno de Londres "fue el primero" de Europa "en reconocer" al país sudamericano.
Acerca del conflicto de las Malvinas, la embajadora británica pidió que "por un momento no pensemos la historia en términos de política, de economía o de negocios".
El inicio de la exploración petrolera de empresas de capital británico en las Malvinas tensó la relación entre el Reino Unido y Argentina, que impuso restricciones a los barcos que parten de tierra firme hacia el archipiélago por considerar que esas operaciones "violan su soberanía" sobre las islas y aguas circundantes.
Argentina ha presentado sus quejas ante la ONU e incluso pidió a la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, que aliente un diálogo entre los dos países en conflicto para discutir la soberanía de las islas situadas en el Atlántico sur.
La soberanía de las Malvinas fue objeto de una guerra entre ambos países en 1982 que concluyó con la derrota de las tropas argentinas. EFE