Alrededor de 15.000 personas se concentraron ayer en los alrededores de la mezquita estambulí de Fatih para asistir a la ceremonia fúnebre por los nueve activistas turcos que perdieron la vida en el asalto del ejército israelí a la Flotilla de la Libertad.
La ceremonia se desarrolló dentro de la mezquita con los nueve féretros cubiertos con banderas turcas y palestinas, pero a los cientos de personas que siguieron la ceremonia en el templo se sumaron miles de personas en el exterior en un respetuosos silencio, según medios turcos.
Una vez terminada la ceremonia parte de los congregados lanzaron consignas como "abajo Israel" y gritos de "Alá es grande".
Dos de los muertos fueron enterrados en Estambul ayer, mientras que los demás restos mortales serán trasladados a sus localidades de procedencia para darles sepultura.
Entre los fallecidos destaca un joven de 19 años con doble nacionalidad turco-estadounidense que será enterrado en la localidad anatólica de Kayseri.
Los nueve murieron por disparos de bala: cuatro de ellos presentaban heridas por arma de fuego en la cabeza y uno en el pecho, incluso a corta distancia, según forenses citados por el canal NTV. El resto de los activistas turcos pasan controles médicos para determinar su estado.
El presidente turco, Abdullah Gul,dijo ayer que Israel cometió ayer el peor error de su historia y que su país ni perdonará ni olvidará lo sucedido.