La ola de frío polar que se extiende por el Cono Sur, incluso por zonas subtropicales, dejó hasta ahora al menos 80 muertos en cinco países de la región, tanto por hipotermia como intoxicación con gases debido al uso de calefactores defectuosos.
Las malas condiciones climáticas han causado además la muerte de ganado en zonas de Brasil vecinas a Paraguay, la declaración de una emergencia agrícola en el sur de Chile y la cancelación o suspensión de decenas de vuelos regionales en el aeropuerto "Jorge Newbery" de Buenos Aires, donde cientos de turistas permanecían ayer varados.
En Argentina, el número de muertos por hipotermia llegó a once, luego de que el domingo se registrara el fallecimiento de un bebé y un anciano en la ciudad de La Rioja (noroeste), según informaron ayer fuentes sanitarias y organizaciones sociales.
Desde el comienzo del invierno, hubo además otros 33 muertos en Argentina por intoxicación con monóxido de carbono, por uso de artefactos o instalaciones de calefacción defectuosos.
En Bolivia, la ola de frío ya ha causado 18 muertos, la mitad de ellos pobladores de la ciudad de El Alto, vecina a La Paz, según el último recuento difundido.
Las bajas temperaturas afectan en mayor medida a regiones del oriente boliviano, de cálido clima subtropical, donde el domingo se registraron los últimos decesos: dos en el departamento de Santa Cruz y el otro en Tarija, fronteriza con el norte de Argentina.
En Santa Cruz se ha contabilizado un total de 6 muertos, todos indigentes, mientras que en el departamento boliviano de Cochabamba murieron dos bebés, uno abandonado y el otro junto a sus padres, con los que vivía en las calles cochabambinas.
El Ministerio de Educación de Bolivia suspendió las clases hasta el miércoles para prevenir la proliferación de gripe y otras enfermedades entre los estudiantes, mientras que el servicio meteorológico anunció que se prevé que la ola de frío en todo el país se prolongue hasta agosto, en etapas cíclicas de frentes fríos.
En Brasil, al menos nueve personas, la mayoría indigentes "sin techo", han muerto en el sur del país como consecuencia de una ola de frío que redujo las temperaturas a niveles muy bajos.