El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y sus presidentes autonómicos y regionales del PP se han comprometido este sábado a "garantizar" los servicios sociales básicos que reciben los ciudadanos, pero para ello se han marcado como reto establecer un "sistema de prioridades" para salvar la prestación de esos servicios. En esta línea, han apostado por acometer una "profunda" reforma de las administraciones públicas y los servicios que prestan, eliminando duplicidades y ordenando competencias, pero sin devolverlas.
Así lo ha anunciado la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que ha explicado ante la prensa las medidas acordadas por los 'barones' del PP en esta "fructífera" reunión, que se ha prolongado durante más de tres horas, y a la que han asistido también la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y los ministros de Hacienda y de Economía, Cristóbal Montoro y Luis De Guindos, respectivamente.
En este encuentro, Rajoy y sus 'barones' han suscrito una declaración de cuatro páginas en la que, entre otros puntos, expresan su apoyo con el cumplimiento de los objetivos de déficit y las reformas que está realizando el Gobierno. Cospedal ha definido este texto como "el gran pacto del Partido Popular" y ha invitado a sumarse a otros grupos políticos. De hecho, ha asegurado que el Ejecutivo no renuncia a un gran pacto con el primer partido de la oposición, si bien ha recordado que el PSOE ya votó en contra de la Ley de Estabilidad Presupuestaria esta misma semana en el Congreso.
SERVICIOS BÁSICOS
La 'número dos' del PP ha explicado que para poder garantizar los servicios sociales básicos, el Ejecutivo central y los gobiernos del PP "están estableciendo un sistema de prioridades para que los servicios sociales básicos se puedan mantener" porque "de otra manera, con la situación económica" que han "heredado" del PSOE sería "imposible" mantenerlos.
"El compromiso con la ciudadanía española y el mantenimiento de lo servicios sociales básicos es absolutamente total, como lo es el establecimiento de prioridades para garantizar esos servicios básicos", ha insistido Cospedal, que ha recalcado que no se pueden considerar derechos sociales los beneficios de los que han disfrutado los ciudadanos en época de bonanza económica, como libros o transporte gratis.
En la reunión en 'Génova', los presidentes del PP se han comprometido a "racionalizar" las administraciones, evitar duplicidades y ordenar las competencias, con el fin de "gestionar el dinero de los ciudadanos de la manera más austera y sobria posible", en palabras de Cospedal.
De hecho, en el documento que han suscrito figura explícitamente la necesidad de "acometer de forma clara y profunda una reforma del conjunto de las administraciones públicas y de los servicios que prestan". Se trata, añade el texto, de "usar con más eficiencia y capacidad los recursos que los ciudadanos, con gran esfuerzo, ponen a disposición de todas las administraciones".
En cuanto a las competencias -el documento no habla en ningún momento de devolverlas como planteó esta semana Esperanza Aguirre--, se comprometen a "eliminar las duplicidades existentes de forma que cada ámbito competencial sea ejercido por una sola administración"