Más de medio millón de inmigrantes perderán la cobertura sanitaria integral de la que ahora gozan en España porque se encuentran en situación irregular y, de salir adelante la modificación de la Ley de Extranjería anunciada por el Gobierno el pasado viernes, ya no bastará con estar empadronado para acceder a una tarjeta sanitaria.
En la actualidad, 573.712 inmigrantes figuran en las estadísticas oficiales como residentes en España sin autorización, ya que 3,2 millones de personas nacidas en países de fuera de la Unión Europea están empadronadas en el país pero son 2,6 millones los permisos expedidos a ciudadanos de estas nacionalidades.
Estos datos son fruto de cruzar el avance de resultados del Padrón Municipal a 1 de enero de 2012 que elabora el Instituto Nacional de Estadística con el balance oficial de permisos de residencia cerrado a 31 de diciembre de 2011 de la Secretaría General de Inmigración y Emigración.
La cifra está sujeta a variaciones, principalmente porque el Padrón Municipal se actualiza cada dos años, por lo que pueden figurar inmigrantes que hayan fallecido o abandonado el país y que aún no hayan salido del registro de sus municipios de residencia. Además, esta cadencia en la depuración de los datos hace que sólo cada dos años se eliminen las posibles duplicidades.
Esta puede ser una de las razones por las que sólo un año antes, en 2010, la diferencia entre ambas estadísticas arrojaba un balance de 872.556 personas residiendo en España sin permiso para hacerlo y 835.530 en el año 2009. Con todo, un extranjero puede regularizar su situación en España reuniendo una serie de requisitos de empleabilidad al cabo de tres años de residencia en el país, antigüedad que estas personas acreditan con el registro del Padrón.
Además, inscribiéndose en el registro municipal los extranjeros no comunitarios pueden acceder a una tarjeta sanitaria estén o no en situación irregular, ya que el artículo 12 de la Ley de Extranjería reconoce que los inmigrantes "inscritos en el padrón del municipio en el que tengan su domicilio habitual, tienen derecho a la asistencia sanitaria en las mismas condiciones que los españoles".