El ministro de Defensa, Pedro Morenés, recalcó ayer, durante la celebración de la Pascua Militar presidida por el Rey en el Palacio Real, que los miembros de las Fuerzas Armadas mantienen el ánimo "firme y sereno" y cumplen "calladamente" su deber "sin atender a absurdas provocaciones".
Además, ante el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y de la cúpula militar, Morenés ha destacado que los militares "quieren ser ejemplos de unidad, honestidad, generosidad y valentía para la sociedad a la que sirven".
Aunque sin citarlo expresamente, el ministro de Defensa parecía referirse a la polémica alentada desde Cataluña en los últimos meses sobre el papel de las Fuerzas Armadas ante las ambiciones soberanistas de la Generalitat, con acusaciones de vuelos a baja cota de aviones de combate y con denuncias de supuestas amenazas de intervenciones militares en esta comunidad.
Morenés quiso mantener a las Fuerzas Armadas al margen de estas acusaciones y en las últimas semanas se limitó a asegurar que el Ejército "está tranquilo" ante la situación en Cataluña, pero este domingo ha defendido a los militares al asegurar que llevan a cabo su trabajo "sin atender a absurdas provocaciones".
"Las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil garantizan la seguridad y defensa de España, que son el fundamento sobre el que se asienta el progreso estable y el desarrollo sano de nuestra sociedad y de los principios que la rigen: la libertad, la justicia y la solidaridad. Y anteponen el cumplimiento de su deber constitucional en defensa de la Patria a cualquier anhelo o interés particular de sus miembros", ha recalcado.
CRISIS
El ministro ha reconocido la difícil situación económica del país, por la "profunda crisis", pero ha recalcado que las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil "cumplen su cometido" a pesar de esta coyuntura y trabajan "para sacar el máximo partido de aquello que, con tanto esfuerzo, los españoles ponen en sus manos" para su "defensa y seguridad".
Pero si el año pasado, en su primer discurso dos semanas después de tomar posesión de su cargo, pidió a los militares "entrega y sacrificio" ante la crisis, este domingo se ha mostrado convencido de que los miembros de las Fuerzas Armadas "afrontan esta situación con valentía y solidaridad, para acometer resueltamente las dificultades; con disciplina, para cumplir con su deber sin pedir ni rehusar; y con lealtad a España y a sus intereses generales".
Y ha garantizado que estos valores "permitirán sin duda a la seguridad y defensa de España salir reforzadas de esta dura etapa". "Este es nuestro reto, que asumimos con entusiasmo y convicción y que, entre otras acciones, requerirá una básica: mejorar la eficiencia y, en consecuencia, la eficacia de la organización militar y del ministerio que la dirige", ha dicho.
Para ello, ha explicado que el Ministerio ha impuesto ya "medidas de control y reducción del gasto muy duras, sobre unos presupuestos ya de por sí mermardos", a las que se suman un "esfuerzo consecuente de reorganización" de sus infraestructuras.