El déficit del Estado hasta abril superó en un 1 por ciento al del mismo periodo del año anterior, hasta situarse en el 2,38 por ciento del PIB (25.007 millones), con una caída de los ingresos fiscales, impuestos y cotizaciones, del 5,3 por ciento.
Este saldo negativo fue consecuencia de unos ingresos de 30.911, el 1,2 por ciento más que hasta abril del pasado año y unos gastos de 55.918 millones, el 1,1 por ciento más.
Hacienda explica que en la cuenta de ingresos influyó la caída de los recursos impositivos del 6,7 por ciento, así como el alza de las cotizaciones sociales del 5,4 por ciento y del resto de recursos no financieros del 81,4 por ciento, con un aumento en un 28 por ciento de los dividendos y otras rentas.
La recaudación del Estado por impuestos directos registró una caída del 11,5 por ciento, con un descenso del 5,3 por ciento en el IRPF (hasta 26.518 millones) y del 37,1 por ciento en el impuesto sobre sociedades (2.347 millones).
Por impuestos indirectos, el Estado obtuvo 14.125 millones, el 13,1 por ciento menos, con una caída del 4,7 por ciento en el IVA (hasta 19.980 millones) y del 2,7 por ciento en los impuestos especiales (5.929 millones).
Los empleos no financieros, que alcanzaron los 55.918 millones, estuvieron marcados por la subida del 0,2 por ciento de los empleos corrientes, que se situaron en 53.297 millones, y especialmente por el aumento del 23,5 por ciento de los gastos de capital hasta 2.621 millones.
Los intereses devengados hasta finales de abril ascendieron a 9.082 millones, el 11,8 por ciento más que en el mismo periodo de 2012.
Asimismo, se registraron incrementos en las prestaciones sociales distintas de las transferencias sociales en especie con un gasto de 3.487 millones, de los que 3.376 se debieron a las pensiones de clases pasivas, que crecieron el 5,5 por ciento.
Los gastos de personal, por un total de 7.965 millones, disminuyeron el 1,1 por ciento, con un descenso del 6,4 por ciento de los sueldos y salarios debido, sobre todo, a la limitación en la sustitución de efectivos.
La formación bruta de capital descendió el 6,9 por ciento con un gasto de 1.437 millones de euros.
En términos de caja -que registra ingresos y los pagos cuando efectivamente se han realizado-, el déficit llegó en abril a 17.404 millones, el 1,66 por ciento del PIB, lo que supone un incremento del 89,3 por ciento respecto al mismo mes del año anterior.