El viceprimer ministro de Turquía, Bulent Arinc, ha reiterado su respaldo a la actuación de la Policía en el desalojo de la plaza Taksim y el parque Gezi en Estambul y ha advertido de que sacará al Ejército a la calle si la situación se vuelve incontrolable.
Arinc ha asegurado, en una entrevista en televisión, que el Gobierno tiene el deber de "detener una protesta ilegal". "Aquí está la Policía, si no basta tenemos gendarmes y, si no, las Fuerzas Armadas", ha afirmado el 'número dos' del Ejecutivo, según el periódico 'Hurriyet'.
Arinc ha subrayado que "nadie debería tener queja de la Policía" y ha sugerido que quienes critican su actuación durante los últimos días son precisamente quienes intentan destruir las principales ciudades del país. En este sentido, ha indicado que las concentraciones de las últimas dos semanas no tienen nada que ver que con las "manifestaciones inocentes" que comenzaron hace 20 días en protesta por la destrucción del parque Gezi.
En cualquier caso, y pese a las advertencias lanzadas por Arinc, la participación del Ejército en la represión de las manifestaciones parece improbable de momento. El ministro del Interior, Muammer Guler, ha aclarado que no hay ninguna decisión al respecto: "No he pedido el apoyo del Ejército".
Guler, sin embargo, sí ha sugerido que la gendarmería podría sumarse a la labor de contención de las movilizaciones, aunque ha matizado que se trata de un procedimiento relativamente normal en este tipo de casos.
Reapertura
Ayer fue reabierta la plaza Taksim, epicentro de las protestas antigubernamentales de las últimas semanas, una vez concluidas las labores de limpieza tras el desalojo del sábado por la noche, en el que la Policía empleó gases lacrimógenos y cañones de agua para expulsar a los miles de manifestantes que estaban acampados en el parque Gezi, aledaño a la plaza.
Efectivos antidisturbios impidieron por la fuerza durante toda la jornada del domingo el acceso al parque Gezi y la plaza Taksim para evitar que se celebrara la concentración convocada para la tarde del domingo por la Plataforma de Solidaridad de Taksim en protesta por el desalojo.
Los disturbios se han prolongado durante toda la jornada y buena parte de la noche, pero esta mañana la plaza ha amanecido tranquila. Sin embargo, la Policía impide todavía el tráfico rodado.
Por otra parte, este lunes la Unión de Colegios de Abogados de Turquía (TBB) ha anunciado que trasladará la cuestión de los abusos policiales contra los manifestantes al secretario general del Consejo de Europa, Thorbjorn Jagland, basándose en el Artículo 52 de la Convención Europea de Derechos Humanos, que habilita a Jagland a pedir explicaciones a los países miembros sobre el posible incumplimiento de los artículos de la Convención.
Además, la TBB ha anunciado denuncias contra la investigación iniciada por las autoridades contra el Colegio de Médicos de Estambul por organizar un hospital de campaña en un hotel de Estambul en el que médicos voluntarios atendían a los heridos durante las protestas.
Una de las imágenes que más se ha difundido sobre el desalojo de la acampada de los 'indignados', que había durado 18 días, ha sido la de policías esposando a sanitarios aún ataviados con batas blancas en el Hotel Divan, muy cerca del parque Gezi.