Sigue el 'troleo' en las redes sociales a Pablo Iglesias e Irene Montero por su polémica decisión de adquirir una vivienda en la sierra de Madrid de 600.000 euros. Después de las numerosas reacciones en todos los ámbitos, quejas internas incluidas, y de la pancarta colgada en el inmueble dando la bienvenida a «refugiados y ocupas», se ha estado difundiendo de forma masiva un llamamiento a celebrar una barbacoa de apertura en la «mansión» de los dirigentes de Podemos en Facebook a la que se apuntaron miles de personas, hasta que la red social canceló el evento.
Casi 40.000 personas habían confirmado su asistencia a la ficticia reunión, una vistosa fórmula de criticar la adquisición de la casa donde el líder de Podemos y su portavoz en el Congreso van a criar a sus hijos.
Toda acción tiene su reacción, y los dirigentes de la formación morada tienen previsto preguntar a las bases si por este motivo, que no está del todo ligado a su acción política aunque sí tiene connotaciones poco edificantes, deben abandonar sus cargos de representación.
Recordemos que el propio Iglesias fue muy crítico con el exministro de Economía Luis de Guindos cuando este adquirió una vivienda por un coste similar a la que ahora él ha comprado.
Tampoco convencieron demasiado las explicaciones que al respecto ofreció Montero, en rueda de prensa, ante las insistentes preguntas de los periodistas.