El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha afirmado que el hecho de que Francisco Franco esté enterrado en el Valle de los Caídos, junto a «tantas víctimas» de la Guerra Civil y la Dictadura, es un hecho «casi incompatible» con un buen legado democrático, y considera que un dictador «no puede estar enterrado en un lugar de honor».
En declaraciones a los medios, antes de participar en un encuentro con militantes del PSOE, el expresidente ha dicho que el Decreto Ley aprobado por el Consejo de Ministros es «una decisión que hace nuestra democracia más fuerte, que consolida raíces democráticas y que, frente a lo que algunos dicen, es consecuencia de una buena transición y evolución democrática, porque la democracia es un proceso abierto que va perfeccionándose».
José Luis Rodríguez Zapatero afirmó que si se hace una reflexión de las bases que se sentaron durante los años de la transición, lo que se ha hecho en estos cuarenta años es «ir llenando contenidos democráticos en leyes de derechos, en el Estado del bienestar social y también en los fundamentos democráticos».
Según Rodríguez Zapatero, «esa extensión de derechos lleva a que una democracia avanzada pueda permitir que el derecho a la memoria personal, al reconocimiento a las víctimas de la Dictadura y la Guerra Civil permanezca entre nosotros».
Por ello, considera «extraordinariamente positivo» que las generaciones más jóvenes «completen esta tarea» y no censuren «a quienes hicieron la transición y no resolvieron algunas cosas», pues «fueron legando un pozo a las nuevas generaciones de más afán democrático y de perfeccionar la democracia», remarcó que el expresidente, quien incidió en que eso se expresa en la Ley de Memoria Histórica de 2007 y en lo que ahora es su desarrollo en todos los órdenes.
A este respecto, José Luis Rodríguez Zapatero hizo hincapié en que siempre que se hace una tarea hay que pensar en las nuevas generaciones: «Así me inspiré para hacer una ley de memoria histórica, recogiendo lo que la gente joven tenía. Y muchos de los nietos y bisnietos de los que sufrieron la contienda y la represión son los que ahora han puesto en pie esta reivindicación, que no es contra nadie, sino que es en favor de las buenas raíces democráticas».
UN DEBATE MÁS SOSEGADO
El expresidente del Gobierno reconoce estar sorprendido ante algunos argumentos que se han hecho sobre la exhumación de los restos de Franco, y cómo ha visto a los nuevos líderes del PP y de Cs hacer algunas reflexiones a las que le gustaría que le dedicaran «algún tiempo más, que las reflexionaran con más profundidad y con un debate más sosegado», pues considera «muy importante» que todas las fuerzas políticas democráticas «entiendan e interpreten bien qué significa este hecho para nuestra democracia».
Según Rodríguez Zapatero, «gracias a una buena transición podemos hacer algo tan normal en una democracia como decir que un dictador no puede estar en un lugar de honor. Es algo normal y lógico que cualquier demócrata debe de asumir, y lo hacemos en un país más que reconciliado, y donde el pluralismo y la libertad de las ideas está plenamente garantizado».
Preguntado por el hecho de que esto no se hiciera cuando era presidente, quiso dejar claro que estuvo «muy implicado» en la elaboración de la Ley de Memoria Histórica y quiso recordar que la reivindicación de las asociaciones de memoria histórica no empezaron hasta el año 2000, con la investigación sobre las fosas comunes, que es cuando una generación se empezó a preguntar por sus abuelos.
Así, opina que la Ley de Memoria Histórica «es el fruto del impulso que empieza en el año 2000 y abre todos los capítulos y todas las carpetas que se habían dejado cerrado». De hecho, resaltó que en el año 2011 ya se hizo un informe sobre el Valle de los Caídos que ya recomendaba la exhumación de Franco y recordó que fue una de las últimas tareas de mi su Gobierno.
José Luis Rodríguez Zapatero admite que lee hubiera gustado que esa recomendación la hubiera llevado adelante el Gobierno de Rajoy: «Hubiera sido fantástico para nuestro país y hubiera tenido el aplauso cerrado del Partido Socialista. Le reconozco que no derogara la Ley de Memoria Histórica, pero luego no hizo nada con ella».
Por tanto, el expresidente no ve sorprendente que si en el año 2007 el Gobierno del PSOE hizo la Ley de Memoria Histórica, una de las primeras tareas del Gobierno de Pedro Sánchez haya sido completar todo el desarrollo, incluso con alguna reforma.
HITOS DEMOCRÁTICOS
Rodríguez Zapatero destacó que al Partido Socialista le ha tocado ser el protagonista de muchos de los hitos democráticos de este país, quizá porque va a cumplir 140 años de historia; pero reconoce que le gustaría que algunos de esos hitos democráticos «los compartiéramos todos». Además, cree que si el centro-derecha pensara un poco en las próximas décadas, tendría una posición «menos crítica y más abierta» y recibiría su aplauso porque «es bueno que el país pueda hacer un debate sereno sobre hacer que ninguna familia esté buscando a sus ascendientes en ninguna fosa»
«Ese día, la democracia española será una democracia más serena y más auténtica porque habrá dejado a muchos ciudadanos tranquilos. Esto es un derecho que la democracia debe satisfacer a todos los ciudadanos», remarcó.
Sobre la oposición de la Fundación Francisco Franco a la exhumación y preguntado por si se tendría que ilegalizar esta fundación, considera que la democracia es un espacio público que da oportunidades, incluso a los que están contra ella. Ahora bien, opina que habrá que ver cuál es la naturaleza que tiene la Fundación.
También lanza un mensaje a la familia de Francisco Franco y pide que valoren que la democracia «no es la tratado mal y que incluso ha sido generosa con ellos». «Lo podrían considerar una sola vez porque ha sido así», subrayó.
Por último, mostró su preocupación por que los partidos del arco parlamentario no estén en una actitud «más clara y más diáfana» sobre la exhumación de los restos de Franco. «Creo que deberían de reflexionar y tendríamos que procurar un debate sereno, tranquilo, razonable sobre hechos que cierran nuestra memoria en favor de la democracia. Cada vez que una fosa permite a familias que han sufrido conocer qué pasó y rendir un homenaje, creo que la democracia es más fuerte».