Zaragoza y su área de influencia y la ciudad de Huesca retroceden a la fase 2 de la desescalada, en una concepción «flexibilizada» que es posible por el uso obligatorio de la mascarilla según el Gobierno de Aragón, por el incremento de casos detectados en estas zonas y una tendencia al alza.
Así lo ha anunciado este lunes la consejera de Sanidad, Sira Repollés, quien ha añadido que las cuatro comarcas que tuvieron que desescalar a las fase 2 el 22 de junio (Cinca Medio, La Litera, Bajo Cinca y Bajo Aragón-Caspe) también entran en esa fase 2 «flexibilizada», más favorable para ellas, en cuanto se publique la orden en el Boletín Oficial de Aragón, situación que ahora van a compartir Zaragoza y su comarca y Huesca capital.
Eso supone que 870.000 aragoneses en total se encontraran en esta situación, alrededor del 70 % de la población.
Además se hace obligatorio el uso de la mascarilla en toda la Comunidad a partir de las 00.00 horas.
El director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo, ha precisado que esta situación supone un «intermedio» entre la fase 2 y la «normalidad», es decir, que se limitan aquellas actividades donde una mayor acumulación de personas puede hacer que se produzca una transmisión comunitaria con mayor facilidad.
La movilidad entre provincias, sin embargo, sigue sin limitaciones, han precisado fuentes del Gobierno de Aragón.
La orden que fija el uso obligatorio de las mascarillas en cualquier circunstancia, en espacios abiertos o cerrados con convivencia pública ha permitido que la desescalada a la fase 2 se pueda adoptar de manera flexibilizada, según Falo.
La fase 2 «flexibilizada» no permite la apertura de locales de ocio nocturno, al igual que sucedía en la fase 2, según ha recordado Falo, y restringe actividades de concurrencia pública, como velatorios o ceremonias.
Se establece un aforo del 75 % en comercios, piscinas o mercadillos, que en la fase 2 era de un tercio, y del 50 % en el interior de los establecimientos hosteleros, siempre en mesa ya que el consumo en barra no está permitido.
En las terrazas el aforo se limita al 75 % con agrupaciones de diez personas como máximo.
En el ámbito cultural, teatros, cines o exposiciones se establece un aforo del 75 %, que también relaja el tercio permitido en la fase 2.
La consejera ha precisado que en la fase 2 anterior, regulada por el estado de alarma que ya no está vigente, había franjas horarias y limitaciones de la movilidad, pero no las hay ahora.
Esta medida se ha adoptado a pesar de que la incidencia de nuevos casos es aún «moderada», «no excesiva», tal y como ha explicado el director general, quien ha dicho que en unas pocas semanas «se duplican los casos cada dos días» en la comarca central y Zaragoza capital, donde se han duplicado cada dos días los contagios.
En el caso de Huesca tampoco existen incidencias muy altas aunque el «goteo» de casos se ha incrementado también en los últimos días y los dos o cuatro casos por 100.000 habitantes han llegado a ser siete o nueve en los últimos días, mientras que en la comarca de la Hoya en la última semana había 50 cuando la anterior registró 17.
En la última semana, según Falo, se han registrado 169 casos por cada 100.000 habitantes en Bajo Aragón-Caspe (Zaragoza), 235 en el Bajo Cinca, 93 en la Litera y 71 en el Cinca Medio, lo que supone un «ligero descenso» en la comarca zaragozana y la Litera y un «pequeño incremento» respecto a semanas anteriores en las otras dos, aunque «no llegan a la situación del pico».
Con respecto a Aragón, Falo ha explicado que el viernes se notificaron 68 casos, el sábado se registraron 128 (46 en Huesca, 1 en Teruel y 81 en Zaragoza) y el domingo, los que se comunicarán este lunes, 32 (15 en la provincia de Zaragoza, 13 en la de Huesca y 1 en Teruel), aunque ha aludido al «artefacto» del fin de semana para advertir que pueden notificarse más a partir de mañana.
El director general ha insistido en que hay «un alto porcentaje de asintomáticos y muy alto de población joven» y ha hecho un llamamiento a la responsabilidad individual y social, al tiempo que ha resaltado que se ha actuado con anticipación para evitar impactos «más graves».