La vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, ha descartado que la solución a la subida de los precios de la energía pase por medidas como bajar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) o el IVA. Así lo ha defendido la también ministra de Asuntos Económicos durante su intervención este miércoles en la sesión de control del Congreso para responder a las críticas de Vox y Ciudadanos, que han acusado el Ejecutivo de «inacción» y de «desclasificar» a los colectivos que protestan contra sus políticas.
«Yo no descalifico a nadie porque entiendo la zozobra, la tristeza y la incertidumbre por la que atraviesan los españoles después de dos años duros (por la pandemia) y ante una situación sin precedentes como es una guerra en las fronteras europeas», ha señalado Calviño. En su opinión, la clave radica en «responder de la forma más eficaz» a los problemas en vez de optar por «soluciones milagrosas que evidentemente no resuelven los problemas», en alusión a las medidas que propone la oposición. «El año pasado ya topamos el precio del gas, extendimos bonos a las familias más vulnerables, bajamos el IVA y los impuestos a la electricidad, que ya están entre los más bajos de Europa y no tenemos margen para reducirlos más...», ha enumerado en la Cámara. Calviño ha incidido en que estas dificultades «no se resuelven bajando el IRPF, ni tampoco se resuelven bajando el IVA, que los propios transportistas ya han dicho que no soluciona sus problemas».
La ministra ha respondido así a las críticas del portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, quien ha acusado al Ejecutivo de «tratar igual de mal a todos los que le critican» y acusar de ser de ultraderecha a los colectivos que se manifiestan contra sus políticas, como transportistas, ganaderos, cazadores o autónomos. «¿Saben cuál es el problema? Están solos, no están escuchando a la calle y la gente lo está pasándolo mal», ha denunciado. «Parece que se ríen de nosotros», ha censurado por su parte el portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal, que ha instado al Gobierno a dejar de «desclasificar a aquellos que protestan» contra sus políticas. Bal ha abogado por que España siga los pasos de países como Alemania, Bélgica, Francia, Italia o Portugal y apruebe cuanto antes medidas urgentes para hacer frente a la subida de los precios, como la reducción de los impuestos que gravan los carburantes o la concesión de ayudas directas compensatorias.