El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha llamado este lunes a todos los actores políticos, institucionales y sociales a unirse ante el plan de choque de respuesta al impacto económico y social de la guerra en Ucrania, y les ha pedido «compartir el sentido del mejor patriotismo». En una conferencia en el marco del tercer encuentro «Generación de Oportunidades», organizado por Europa Press y McKinsey&Company, Sánchez ha subrayado que ese mejor patriotismo es «comprometer» a España en una «causa justa y salir adelante con orgullo».
Ha admitido que las dificultades son extraordinarias pero los valores europeos son la «única senda de prosperidad posible». «Lo que está en juego -ha dicho- es nuestro modo de vida, la Unión Europa y el respeto a la ley nacional e internacional, a la democracia y al Estado de derecho que representan las democracias europeas». Sánchez ha iniciado su discurso con una amplia referencia al conflicto en Ucrania y ha dado cifras de la «crueldad de la guerra de Putin».
Así ha recordado que ya han muerto más de un millar de civiles, casi un centenar de niños y, según la OTAN, el ejército ruso ha contabilizado 40.000 bajas, entre muertos y heridos. Y, en menos de 30 días, cerca de cuatro millones de personas han huido del país como refugiados y otros seis millones y medio están desplazados de sus hogares dentro de Ucrania. Sánchez ha lamentado que estos números seguirán creciendo y desde el Gobierno ha querido trasladar toda la «solidaridad y calor» con el pueblo ucraniano.
Ha asegurado el presidente ruso, Vladímir Putin, pasará a la historia por «sus delirios y sus estragos» y ha confiado en que «pague por sus crímenes de guerra ante la corte penal internacional». También ha insistido en que Putin no quiere que avance la democracia y, en consecuencia, ataca a Europa porque quiere «una Europa débil y aniquilar el modelo democrático y social que tanto ha costado preservar y fortalecer y que tantas décadas de paz ha traído al continente».