El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, no ha descartado que en un futuro España deba tomar medidas de ajuste y austeridad porque el actual Gobierno "no ha tenido que cumplir ninguna norma económica al levantar los límites de déficit, deuda y regla de gasto", lo que ha llevado a que el país esté endeudado en 300.000 millones y ha culpado a Pedro Sánchez de que "cada español tiene un pufo de 6.000 euros en deuda".
Así se ha pronunciado este domingo en una entrevista que ha concedido a El Mundo en la que ha asegurado que lo primero que hará, en caso de gobernar, es explicar el estado de las cuentas de España y reducir el número de ministros.
"Lo que haremos será una auditoría de la realidad económica, fiscal, de deuda y de déficit y en base a eso acometeremos propuestas. Lo que sí aseguro es que con un 30% menos de ministerios el Gobierno será más eficiente. Y cuando la gente vea que no se utiliza un helicóptero, un Falcon y un Audi para desplazarse 300 km, que ningún ministro tiene la tarjeta oro del Falcon, que el Gobierno reduce su estructura en al menos un 30%, empezaremos a mandar un ejemplo a la gente", ha señalado.
Feijóo también ha criticado que el impuesto a la banca que pretende realizar el Gobierno "es una derrama y comporta un riesgo doble" que al final pagarán los ciudadanos. "Estoy convencido de que el impuesto a la banca se repercutirá a los ciudadanos: o subidas de céntimos en las comisiones o incrementos en los tipos de los préstamos o una retribución nula para los depósitos o dando menos crédito. Respecto a las energéticas, es evidente que tienen resultados importantes, por eso quiero que inviertan. Si les ponemos un impuesto, hagamos una exención del 99% del mismo si invierten en España", ha manifestado.
Encuestas
Asimismo, ha reconocido que confía en las encuestas que sitúan a su partido como vencedor en las elecciones porque "cuando hay una tendencia, empieza a tener credibilidad" y ha prometido que si se proclama presidente de España protegerá el catalán y también el castellano para "que no sea una lengua extranjera en Cataluña".
En la entrevista, el líder popular ha lamentado el "hartazgo" de la población por tener "un presidente en recesión y un Gobierno en crisis". "En los últimos meses todas coinciden en que el PP sube y es mayoritario en la preferencia de los españoles y el PSOE, baja. Hoy, el PSOE no podría gobernar España", ha señalado, en relación a la credibilidad que otorga a las actuales encuestas.
Al respecto, ha recordado que su partido ha cosechado recientemente "victorias muy contundentes" y ha repasado la mayoría absoluta en Galicia, "un espectacular resultado en Madrid" o "el triunfo histórico en Andalucía", por lo que cree que esos resultados también se podrán trasladar a las elecciones generales.
"Quiero repetir los resultados de Galicia, Andalucía y Madrid. No renunciaré a una mayoría suficiente para poder gobernar con ministros del PP. Este es el objetivo. Algunos pensaban que es ingenuo pero creo que ya empiezan a pensar que es posible", ha afirmado.
En este sentido, ha apuntado que si este domingo hubiese elecciones está convencido de "tener la mayoría suficiente para gobernar" y ha asegurado que no contempla realizar un pacto de gobierno. "Hay dos posibilidades de gobernar España: repetir el populismo con un PSOE desdibujado y sus socios independentistas que tienen la llave del Gobierno y de las leyes, o un partido que tiene trazabilidad ante las crisis, con experiencia política y de gestión. Creo que los españoles nos lo están diciendo", ha valorado.
Diálogo con Cataluña
Respecto a un posible diálogo con Cataluña, en caso de gobernar, Feijóo ha apostillado que el espacio constitucionalista catalán es un espacio huérfano y su proyecto en Cataluña y en Euskadi es "representarlo". Por ello, asevera que cumplirán con la Constitución. "Dentro de la Constitución el espacio catalán y vasco nos interesa mucho porque somos autonomistas y constitucionalistas", ha refrendado.
Ese diálogo con Cataluña abordará ideas para mejorar la economía, rebajar impuestos o cómo invertir, aunque rechaza el diálogo con ERC "para transitar hacia una Cataluña en la que el español sea un idioma extranjero, en la que se negocia el incumplimiento de sentencias, en la que se pretende seguir con los actos de sedición y reclama que se quite ese tipo del Código Penal".
En relación con la renovación del CGPJ en la actual legislatura, el líder del PP afirma que cada semana que avanza ve más difícil que se alcance un acuerdo para ello y precisa que el Gobierno "tiene interés en controlar el TC y creo que va a hacer lo que quiera pactando con ERC, Bildu y Podemos durante toda la legislatura".
"Nuestras condiciones para renovar el CGPJ están por escrito. Hemos renunciado en esta legislatura a reformar la ley del Poder Judicial con el compromiso de que en seis meses el nuevo Consejo nos envíe a los grupos una propuesta para que los jueces elijan a los jueces, y ponemos requisitos mínimos: que no se haya sido ministro o secretario de Estado en los últimos siete años; que para ser presidente de la Sala del TS haya que tener 25 años de antigüedad dictando sentencias y crear mil plazas de jueces en cinco años", ha subrayado.