El jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, está convencido de que será posible llegar a un acuerdo con el presidente francés, Emmanuel Macron, para impulsar la interconexión del Midcat, un asunto que tratarán ambos en París junto al primer ministro portugués, António Costa. Sánchez expresó esa confianza en la rueda de prensa con la que cerró su participación en la cumbre informal de líderes de la UE que se celebró en Praga y a cuyo término el presidente francés desveló que se verá próximamente en París con los jefes de Gobierno de España y Portugal. El jefe del Ejecutivo español certificó esa reunión, que aún no tiene fecha, pero que dijo que se convocará para antes del Consejo Europeo de Bruselas del 20 y 21 de octubre, donde se abordará la nueva hoja de ruta europea para hacer frente a los altos costes de la energía.
Esa reunión se sumará a la que el próximo viernes, 14 de octubre, tendrán en Berlín Sánchez, Costa y el canciller alemán, Olaf Scholz, para abordar también las soluciones que debe adoptar la UE ante los altos precios energéticos. Sánchez informó de que habló personalmente con Macron en la cumbre de Praga de todo ello y se mostró convencido de que va a ser posible llegar a un acuerdo que case con todas las sensibilidades y preocupaciones que tiene Francia. «Estoy convencido de que vamos a poder lograr con un buen amigo y aliado como el Gobierno francés, un acuerdo en esta cuestión», insistió antes de recordar que el impulso de las interconexiones es un compromiso contraído ya hace años por España, Portugal, Francia, la UE y el Banco Europeo de Inversiones.
Si después de que propuestas españolas como un precio al tope del gas o compras conjuntas gasísticas parecían imposibles, y ahora se van abriendo paso, el presidente del Gobierno dijo que también ve posible el acuerdo para que el MidCat se convierta en una realidad. Una infraestructura que recordó que permitiría no sólo el transporte de gas, sino también de hidrógeno verde. En la reunión de París con Macron y Costa, explicó que también se tratarán las interconexiones eléctricas, un aspecto en el que está incidiendo especialmente Francia. Para Sánchez, si algo demuestra esa reunión es la voluntad del Gobierno francés de poder encontrar un acuerdo que recoja sus demandas domésticas, algo ante lo que reiteró que España es sensible. Por su parte, Macron indicó en Praga que «en unos días» verá a Sánchez y Costa en París para intentar encontrar acuerdos sobre las interconexiones energéticas. «Veré en unos días en París al primer ministro Sánchez y al primer ministro Costa, y vamos a encontrar acuerdos muy pragmáticos a tres, porque así es como haremos las cosas y como las hacemos bien, a la europea, pero Francia está a favor de la interconexión y a favor de una Europa solidaria», dijo en otra rueda de prensa tras la cumbre europea informal de Praga.
El presidente del Gobierno ha vuelto a expresar su satisfacción por el hecho de que la hoja de ruta planteada por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en materia energética recoja propuestas que España ha ido planteando desde hace un año. Entre ellas, un tope al precio del gas, las compras conjuntas en el marcado gasístico, la reforma del mercado eléctrico o la extensión de la denominada excepción ibérica. Ahora confía que las propuestas que defiende la Comisión se recojan en una propuesta legislativa. Sobre todo ello debatirán los líderes europeos en la cumbre de dentro de quince días en Bruselas, y Sánchez afirmó que cada vez más estados defienden esas acciones para controlar la inflación. «España quiere ser resolutiva y hemos de ser todos resolutivos», recalcó. Ante la posibilidad de que la UE acuerde que haya fondos específicos para la nueva hoja de ruta energética, consideró que aún es pronto para hablar de ello. No obstante, explicó que si se avanza en esa dirección como han planteado ya algunos comisarios europeos, siempre va a contar con el apoyo del Gobierno de España. El jefe del Ejecutivo se refirió a otros asuntos tratados en la cumbre como el debate sobre las reglas fiscales actualmente suspendidas en la UE y defendió que se llegue a un acuerdo antes de que acabe el año revisándolas para permitir que haya un crecimiento sostenible. Por otra parte, expresó su satisfacción por el hecho de que la UE mantenga una total unidad en el apoyo a Ucrania frente a la invasión de Rusia y dijo que se toma «muy en serio» la amenaza nuclear por parte de Vladímir Putin. «Pero es inaceptable de todo punto y que se especule con ella por parte de Putin», añadió.