La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha rechazado este viernes la posibilidad de que el consistorio ceda espacios municipales para ver partidos del Mundial de Qatar porque «es una dictadura que viola los Derechos Humanos», y autorizarlo sería «ser cómplices», ha dicho. En el pleno municipal del mes de octubre, la alcaldesa ha rechazado un ruego del grupo de Ciudadanos que pedía que el ayuntamiento cediera espacios para seguir los partidos de la selección española en la fase final del Mundial.
Aunque ha expresado su apoyo a la celebración de competiciones deportivas como el mundial de fútbol y a la cesión de espacios para seguir finales, como ya se ha hecho en anteriores ocasiones, Colau ha rechazado «poner recursos públicos ni espacio público a disposición de seguir un mundial que se hace en una dictadura».
«Es un error organizar un evento deportivo mundial, que tiene que promover los valores de la democracia, de la paz y los Derechos Humanos, en una dictadura», ha añadido Colau, que también ha cargado contra la FIFA por ser «cómplice de una dictadura como la de Catar». En la misma línea, el primer teniente de alcalde, Jaume Collboni, también ha expresado su rechazo al Mundial de Qatar y ha cargado contra el presidente de la FIFA, que ayer dijo que la Copa del Mundo es una oportunidad para el país árabe «para deshacerse de prejuicios». «Lo que el presidente de la FIFA llama prejuicios es vulneración de derechos humanos, persecución al colectivo LGTBI y discriminación hacia la mujer. El Mundial no puede ser una excusa para blanquear la dictadura», ha indicado en un mensaje en su cuenta de Twitter.