El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido este martes en rueda de prensa para valorar la situación que vive España después de que el Tribunal Constitucional fallase contra la renovación del Poder Judicial y ordenase parar la misma a raíz de las enmiendas que presentó el PP. El máximo representante gubernamental ha considerado que «asistimos a un injustificable bloqueo del Poder Judicial y del Constitucional».
Sánchez ha asegurado que el Gobierno va a acatar el fallo del Constitucional, pero que van actuar para hacer cumplir la Constitución: «España es una de las grandes democracias europeas y tiene mecanismos para hacer cumplir la ley». «Es un bloqueo favorable a la orientación de unos», ha matizado. Además, considera que la renovación del Poder Judicial es una medida necesaria. «Cumplir con la Constitución es renovar la composición actual del Poder Judicial».
Desde Moncloa analizan la situación y la catalogan como «un hecho grave» y que «es la primera vez que se limita la función de los órganos ejecutivos y de debate, por lo que es un ataque a la democracia. No tiene precedentes en la historia institucional de España y de Europa», ha manifestado. Sin embargo, Sánchez se compromete a «luchar por la voluntad popular y respetar la elección que hicieron en 2019 y a la Constitución», ha finalizado.
La decisión fue adoptada por 6 votos (los de la mayoría conservadora) frente a 5 (los de la minoría progresista), la misma mayoría con la que no aceptaron las recusaciones lanzadas por los partidos del Gobierno contra dos magistrados, esgrimiendo una cuestión técnica: que la relación jurídico-procesal aún no está constituida.