El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha destacado este viernes la resistencia del sistema bancario español ante la volatilidad sufrida por el sector en la Bolsa en las últimas semanas. Lo ha dicho durante la junta general de accionistas, celebrada en el Palau de Congressos de València, y junto al presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri.
Gortázar ha asegurado que «las posiciones de solvencia son muy superiores a los de hace una década y el nivel de resistencia del sistema es muy alto». Ha dicho que esta resistencia es «un bien común para todos, para el país», ya que el sistema financiero es una fuente de confianza. De cara a 2023, ha avanzado un «entorno complejo» y que la prevista desaceleración del crecimiento de la economía española tendrá un impacto en la actividad del grupo.
En este sentido, ha augurado que la inflación afectará a la base de costes, que no se podrán reducir como en 2022, sino que aumentarán. Además, la normalización de los tipos de interés afectará a las provisiones, ya que ha anticipado un incremento de la morosidad, y ha lamentado el impacto del impuesto a la banca en las cuentas del grupo.
Hipotecas
Gortázar ha dicho que casi el 90% de las hipotecas firmadas en 2022 por la entidad fueron a tipo fijo, porcentaje que alcanza el 75% en los últimos siete años. Además, la mayor parte de las hipotecas variables que forman parte de la cartera de la entidad están firmadas antes de 2012, por lo que ya se ha amortizado una parte del capital y la subida de tipos tendrá un impacto «acotado». Sin embargo, ha querido mostrar prudencia y ha avanzado que habrá un «cierto deterioro de los préstamos por el ciclo económico».