El preso de ETA José María Novoa Arroniz, condenado por el asesinato en Vitoria en 1998 del subteniente de la Guardia Civil Alfonso Parada Ulloa, ha vuelto a la prisión de alavesa de Zaballa después de que el Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria haya admitido, con efecto suspensivo, el recurso de la Fiscalía contra el acuerdo del Gobierno Vasco por el que se le clasificó en tercer grado, a la espera de su resolución definitiva.
Según ha informado en un comunicado Sare, red de apoyo a presos de ETA, Novoa, natural de Zigoitia y vecino de Vitoria, regresó este pasado martes a la prisión de Zaballa.
El Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria ha admitido, con efecto suspensivo, el recurso formulado por el Ministerio público contra el acuerdo del Departamento de Justicia del Gobierno Vasco del mes pasado, por el que el recluso progresaba a tercer grado.
Por ello, tendrá que permanecer en la cárcel alavesa hasta que este Juzgado resuelva el recurso. José María Novoa Arroniz, de 53 años de edad, ingresó en prisión el 25 de diciembre de 1999. En 2002 fue condenado a 29 años de prisión por el asesinato del suboficial de la Guardia Civil Alfonso Parada Ulloa en 1998.
Sare ha recordado que el recluso ya cumplió en 2022 las tres cuartas partes de su condena. Además, ha asegurado que, desde que se transfirió a Euskadi la competencia de Prisiones el 1 de octubre de 2021, el Gobierno Vasco ha aprobado la progresión a tercer grado de 43 reclusos, pero en el caso de 30 se ha recurrido esta decisión.
De ellos, 14 han vuelto a ser ingresados en prisión en régimen de segundo grado. Por ello, cree que la evolución de grado de presos está siendo «boicoteada constantemente por tribunales de excepción», y ha realizado un llamamiento a participar en las convocatorias de movilizaciones que convocarán para los próximos días en Zigoitia y en Vitoria con el objetivo de «denunciar esta situación».