El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, se reúnen hoy en el Congreso con la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), la ley de amnistía o la moción de censura en Pamplona sobre la mesa, y sin visos de cerrar acuerdos.
Los líderes del PP y el PSOE llegan a su cita de las 10.30 en la Cámara Baja con posturas muy alejadas, los puentes en su relación prácticamente rotos y en un clima de alta tensión política, tras meses de protestas instadas por la derecha en contra de los pactos de Sánchez con el independentismo catalán y EH Bildu.
La reunión la ha convocado el presidente del Gobierno, pero tanto el lugar como el orden del día los ha marcado Feijóo, porque tras casi diez días para fijar el encuentro, Sánchez le dijo desde la tribuna de oradores que estaba dispuesto a dialogar con él «como quiera, donde quiera y sobre los temas que quiera».
Feijóo ha aceptado discutir, como pedía el PSOE, sobre la renovación del Consejo General del Poder Judicial, la financiación autonómica y la reforma del artículo 49 de la Constitución para eliminar el término disminuido con el que el texto califica a las personas con discapacidad, un punto de consenso que sin embargo no ha permitido que se materialice el cambio.
Además, el líder del PP ha introducido muchos otros temas de debate: la amnistía, la moción de censura en Pamplona, las negociaciones en Ginebra con Junts o ERC, el «acoso a los jueces» por parte de los socios del Gobierno, el deterioro institucional con menciones al Consejo de Estado y la Fiscalía o la «despolitización» de medios de públicos como RTVE y EFE.
Ayer jueves por la tarde, el gabinete de Feijóo avisó a Moncloa de que el líder del PP pedirá aclaraciones sobre la adquisición del 10 % de Telefónica por parte del Estado y sobre si España participará en la misión en el Mar Rojo en contra de los ataques hutíes a las embarcaciones comerciales.
Múltiples asuntos a debatir mientras que España está pendiente de la lotería de Navidad. Al encuentro llegan entre reproches mutuos, con Sánchez afeando a Feijóo un «berrinche» por no gobernar y el popular denunciando que gobernar a cambio de la ley de amnistía o de dar la alcaldía de Pamplona a EH Bildu es un ejercicio de corrupción política.
«ERC, PNV, Bildu, BNG y Junts pusieron precio a sus votos, Sánchez ya conoce lo que valen los del Partido Popular para los temas que ahora plantea. Sus socios no hicieron descuento, yo tampoco lo haré», avisó Feijóo cuando hace unos días se conoció la moción de censura en Pamplona.