El Ministerio de Sanidad ha decidido flexibilizar la imposición de la mascarilla en los centros sanitarios a las comunidades autónomas de modo que puedan rebajarla a solo una recomendación cuando acumulen dos semanas consecutivas de descenso de la incidencia acumulada de los virus respiratorios.
Así lo ha informado la ministra de Sanidad, Mónica García, en una rueda de prensa convocada para explicar las medidas para atajar el impacto del aumento de casos de gripe y otras infecciones respiratorias, en la que ha explicado que la orden comunicada estará en vigor «a lo largo del día», una vez la reciban todas las autonomías.
De esta forma, las once comunidades que aún no la han impuesto en los centros sanitarios, deberán hacerlo en el día de hoy, pero según el nuevo documento que Sanidad les está remitiendo, al que ha tenido acceso EFE, podrán pasar de obligación a recomendación cuando dobleguen el pico y desciendan durante dos semanas la incidencia.
«Las comunidades autónomas que presenten datos de descenso de la Incidencia Acumulada de Infecciones Respiratorias Agudas durante dos semanas consecutivas, según los datos reportados al Ministerio de Sanidad por medio de la Red de Vigilancia, podrán pasar, si así lo consideran adecuado según el conjunto de su situación epidemiológica, de la situación de obligatoriedad del uso de mascarillas en centros sanitarios a una situación de recomendación de uso», reza el texto.
No obstante, «aquellas que a pesar de cumplir ese criterio quieran mantener la obligatoriedad, de acuerdo con el análisis de sus datos, podrán hacerlo durante la vigencia de la Declaración de Actuaciones Coordinadas», subraya el documento. García no ha especificado durante cuánto tiempo se prolongará la vigencia de las actuaciones coordinadas que ha declarado este miércoles, pero sí ha insistido en que ponerse el cubrebocas en un centro de salud u hospital «es una medida muy básica» para protegerse de los contagios.