El PP que lidera Alberto Núñez Feijóo ha logrado un ligero ascenso en las elecciones vascas de este domingo al obtener 7 escaños, uno más que los que cosechó en 2020 la coalición PP+Cs. Sin embargo no ha conseguido cumplir su objetivo de tener la llave en Euskadi -dado que PNV y PSE vuelven a sumar mayoría absoluta con 39 escaños- ni ha arrebatado a Vox su único escaño en Álava. Aunque en 'Génova' hacen una lectura positiva, se trata de una subida agridulce porque los socialistas han crecido dos escaños (pasan de 10 a 12) y tendrán la llave del Gobierno vasco.
En concreto, con el 98,56% del voto escrutado, la candidatura del PP vasco que ha encabezado Javier de Andrés -que fue delegado del Gobierno en el País Vasco y Diputado General de Álava- ha conseguido siete escaños y 95.706 votos (9,22%). En julio de 2020, la coalición formada por PP y Ciudadanos cosechó 6 escaños y 60.550 votos (6,77%). Se trata de unos 35.000 votos más que hace cuatro años. Este respaldo está lejos también de las 133.000 papeletas que el propio Alberto Núñez Feijóo obtuvo en las elecciones generales del 23 de julio del año pasado.
En 'Génova' reconocen que Euskadi, igual que Cataluña, no es un territorio fácil para los 'populares' y su nivel de apoyo es muy inferior al de otros lugares de España, según fuentes del partido. En esta ocasión el PP aspiraba a crecer como mínimo dos escaños y, sobre todo, ser "decisivo", de forma que el PNV y PSE le necesitaran para mantenerse en Ajuria Enea.
Sin embargo, el leve ascenso del PP -que la cúpula del partido cuenta como una subida de tres escaños al considerar que en 2020 consiguió en realidad cuatro diputados porque dos pertenecían a Cs- no les permite jugar un papel determinante en la nueva legislatura que se abrirá en el Parlamento vasco. Los 27 diputados de PNV (que ha bajado cuatro) y los 12 del PSE superan los 38 escaños que dan la mayoría absoluta. De hecho, la subida de los socialistas es una de las peores noticias para la dirección nacional del PP, después de meses de dura oposición a Pedro Sánchez por su "blanqueamiento" a Bildu y la aprobación de la ley de amnistía. Además, la formación de Arnaldo Otegi ha escalado hasta los 27 diputados, seis más que hace cuatro años.
Además, el PP no ha conseguido evitar que Vox se quede sin representación en el País Vasco que era uno de sus objetivos en esta campaña, dado que los de Santiago Abascal mantienen su único escaño en Álava. Después de que en Galicia no lograran representación en el Parlamento gallego, en 'Génova' confiaban en que se repitiera el mismo resultado y se quedaran con cero escaños, algo que llevaría a Vox a afrontar la campaña catalana en una situación de debilidad. Sin embargo, ese escenario no se ha producido.
Aunque aún no hay un escrutinio definitivo, el partido que lidera la vicepresidenta Yolanda Díaz, Sumar, también lograría entrar en el Parlamento vasco con un acta.
UNOS RESULTADOS QUE ESTÁN LEJOS DE LOS 19 ESCAÑOS DE MAYOR OREJA
En 2020, la coalición electoral PP+Cs que encabezó Carlos Iturgaiz logró solo seis escaños y 60.650 votos (6,77%), casi 50.000 votos menos que los que había sacado cuatro años antes el exministro Alfonso Alonso, que obtuvo 9 representantes en el Parlamento vasco y 107.711 votos (10,18%). La mejor marca del PP en el País Vasco la consiguió el exministro del Interior Jaime Mayor Oreja en 2001, con 19 escaños y 326.933 votos (23,12%). Cuatro años antes, en los comicios de 1998, Carlos Iturgaiz había logrado 16 diputados (20,14%), cuatro más que los que había conseguido Mayor Oreja en las elecciones vascas de 1994.
Después de ese resultado de Mayor Oreja en 2001, María San Gil retrocedió cuatro escaños y se quedó en 15 (17,4%), una línea descendente que continuó en las siguientes citas electorales. Así, en 2009, el candidato a lehendakari del PP, Antonio Basagoiti, consiguió 13 actas (14,1%) y cuatro años después, el mismo candidato perdió tres diputados, hasta los 10.
Sin embargo, el resultado del PP en esas elecciones de 2012 fue clave para hacer lehendakari a Patxi López, el primero no nacionalista. En la siguiente cita con las urnas en 2016, con el exministro Alfonso Alonso como candidato, los 'populares' retrocedieron hasta los 9 escaños.
El resultado fue peor en 2020, dado que la coalición PP+Cs, solo logró seis diputados en el Parlamento vasco, unos datos que se remontan a los años noventa -en las elecciones de 1990 Mayor Oreja consiguió seis diputados- y a las elecciones previas cuando concurría bajo la marca de Alianza Popular (en 1986 tuvo dos diputados y en 1984, siete).