La presidenta de la Comunidad y del PP de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha considerado que la reforma de la Ley de Extranjería, que ha registrado PSOE, Sumar y Coalición Canaria en el Congreso de los Diputados, es «una tomadura de pelo» y ha acusado al Gobierno de tratar a los migrantes «como muebles o como números» para quitarse «el lío» antes de «irse de vacaciones. Durante su intervención en la Junta Directiva Autonómica del PP de Madrid, que se ha celebrado este lunes en Leganés, ha sostenido que el Gobierno de Sánchez lo que busca es »la foto para después dejarles abandonados«. »Lo que nosotros defendemos es que no podemos afrontar llegadas masivas por inacción del Gobierno porque eso no integra, eso no ayuda en absoluto", ha remarcado.
Además, la jefa del Ejecutivo madrileño ha apuntado a que «los problemas de inseguridad, los que haya de descontrol o de desprotección» son «competencia y responsabilidad directa de Pedro Sánchez». «Le pedimos que esté a la altura y que sobre todo tengan una política exterior coherente», ha remarcado, para al tiempo exigir que dejen de «parchear» porque esto solo va a crear «un efecto llamada» que no ayuda «ni a los inmigrantes ni a los ciudadanos que viven en sus respectivas pueblos y ciudades».
En este sentido, la dirigente madrileña ha hecho hincapié en que el presidente del Ejecutivo tiene desde hace más de seis años «las responsabilidades de gobierno de las fronteras, de la inmigración y de la seguridad» y no ha hecho «absolutamente nada». En este punto, ha sostenido que el expresidente de Canarias y actual ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, «bien que lloraba» en las conferencias de presidentes «pidiendo auxilio» pero «Sánchez miraba para otro lado porque estaba más ocupado del teletipo posterior». Para Ayuso, estas conferencias de presidentes ya no se celebran porque Sánchez «no quiere reconocer su debilidad territorial».
La presidenta regional ha defendido que Madrid «es una región de apertura» y «de mestizaje» y por ello lo que reivindican es que «la inmigración tiene que ir de la mano de la ley y de la integración».
«Integrar no es repartir, repartir es tratar a los ciudadanos como números o como muebles, que es lo que hace el Gobierno de Pedro Sánchez», ha señalado, para a continuación incidir en que «detrás de cada persona que emigra y que viene a vivir a España jugándose la vida hay una circunstancia personal, hay un nombre, un apellido» y un origen, los cuales deben conocer los gobiernos. Para Ayuso, las fronteras han de protegerse y hay que procurar «unos equilibrios». En este punto, ha destacado el trabajo que realizan en la Comunidad de Madrid «desde hace ya muchísimos años atendiendo a miles de inmigantes, de personas que han dejado su tierra, su familia, para labrarse un futuro mejor».