El coportavoz de Podemos, Javier Sánchez Serna, ha manifestado los recelos de la formación con el plan de regeneración democrática del Gobierno y ha advertido de que difícilmente podrá apoyarlo si no incluye iniciativas, como una ley de medios, ante el «poder mediático oligopólico». En rueda de prensa en el Congreso, ha afirmado que desconoce las iniciativas que aprobará el Consejo de Ministros, dado que no han contactado con Podemos, y ha avisado de que no puede implicar solo una «simple transposición» europea sobre libertad de prensa.
«Lo que hace falta es una regeneración democrática que vaya a la raíz de muchos problemas, que es la concentración del poder mediático», ha apostillado el diputado morado en el Grupo Mixto. Al respecto, ha manifestado que ya propusieron el despliegue de una ley de medios que «democratice» el espacio radioléctrico basado en la máxima de que un tercio del mismo recaería en el sector público, otro en el privado y una tercera parte en el fomento de los denoninados medios comunitarios (fomentados por asociaciones y sociedad civil).
También ha comentado que se debe aplicar una norma que recoja la obligación de que directivos de cadenas y presentadores estén obligados a hacer una declaración de bienes, de cara a ver si hay conflicto de intereses a la hora de definir las líneas editoriales sobre temas de actualidad. Y también ha reivindicado una ley que recoja el derecho a la «rectificación de bulos», lanzados para atacar a oponentes políticos aunque luego sean «desmentidos por vía judicial». «Sin esas medidas de regeneración democrática, insisto, ese plan se va a quedar vacío y en un titular más y, desde luego, no podrá contar con el voto favorable de Podemos», ha zanjado.
Por su parte, la portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Rodríguez de Millán, ha asegurado que el plan de regeneración democrática que aprueba el Consejo de Ministros este martes es «propio de un régimen totalitario» y «fruto del arrebato de un presidente infantil» por la investigación por presuntos delitos de corrupción a su esposa, Begoña Gómez.
En rueda de prensa en la Cámara Baja, Rodríguez de Millán ha trasladado la oposición de Vox a ese plan que Pedro Sánchez llama «contra los bulos» porque, a juicio de la portavoz, servirá para criminalizar a jueces, periodistas y ciudadanos que opinan sobre temas de actualidad en redes sociales en lo que ve como «la actuación propia de un régimen totalitario». «No se dedica a luchar contra el odio, sino a gestionarlo», ha explicado la portavoz parlamentaria.
«El Gobierno dirá lo que es odio y será lo que le venga mal: si jueces investigan sus irregularidades, odio; la gente que comente en redes sociales, odio; y los medios que informen de manera objetiva y veraz, también odio», ha continuado. En esta línea, ha criticado que la iniciativa de Sánchez es «fruto del arrebato de un presidente infantil que se encierra cinco días porque un juez decide investigar las irregularidades de su esposa, el resto de su familia y el PSOE en su totalidad».
«Como no le gusta que jueces y periodistas denuncien lo que está ocurriendo se saca de la manga este plan», ha agregado Rodríguez de Millán, que resume que la intención del Ejecutivo es crear «una cortina de humo» para que no se hable de los casos de Begoña Gómez y Koldo. «Creemos que lo que busca el Gobierno es su propia impunidad con un plan para amordazar a la opinión pública e imponer su relato para que los españoles sean cada vez menos libres, los jueces estén más presionados, los periodistas no den información veraz y los que opinan en redes sociales sean perseguidos civilmente», ha zanjado la portavoz parlamentaria.