La presidenta del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Supremo (TS), Isabel Perelló, ha emitido este viernes un comunicado en el que ha rechazado que se atribuyan «sesgos políticos» a los jueces, después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijera que el PP juega con las cartas marcadas porque cuenta con la ayuda de algunos jueces.
Con ocasión del premio Fórum Europa 2024 a la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, que le ha sido concedido por su compromiso con el fortalecimiento de la Unión Europea y de sus valores, Perelló ha recordado que «entre esos valores se encuentra el de la independencia judicial, que constituye uno de los pilares básicos del Estado de Derecho». En concreto, ha destacado que «es precisamente esa independencia lo que garantiza que la potestad jurisdiccional y la política discurran por caminos separados».
«El Estado de Derecho requiere que los jueces y tribunales puedan ejercer sus funciones atendiendo únicamente al imperio de la ley, sin presiones directas ni indirectas de ningún grupo de poder, público o privado», ha dicho.
En ese sentido, ha señalado que, si bien «la crítica de las actuaciones de los poderes públicos es inherente a la democracia y es, además, un modo en que las instituciones pueden mejorar su funcionamiento», por lo que «la labor de los jueces y magistrados puede, y en su caso debe, ser criticada».
«Lo que no cabe es cuestionarla de forma generalizada y permanente, atribuyendo a los integrantes del Poder Judicial sesgos políticos, pues tal forma de proceder menoscaba la confianza de los ciudadanos en la Justicia, causando con ello un grave daño institucional». Perelló se ha pronunciado así después de que el pasado miércoles el presidente del Gobierno dijera en una conversación con la prensa que el PP juega con las cartas marcadas porque cuenta con la ayuda de algunos jueces.
PiliCaso Victoria Rosell: condena al juez Salvador Alba a seis años por intentar inculpar a la juez Rossell por ser diputada de Podemos; La cúpula de Interior del PP impulsó las operaciones Venus y Bolivar contra los líderes de Podemos (policía patriótica). Seguramente hay caos con signo político diferente y serán tan reprobables como éstos dos ejemplos, pero son una muestra de las acciones ejercidas por personas que ejercen en la democracia y no creen en la democracia y que suelen estar en ese lado. en el otro, la izquierda, lo que hay es una enorme torpeza (en mi opinión) una incapacidad negligente que es casi tan grave como las acciones delictivas de os otros y, en mi opinión, la ineficiencia en democracia predispone a las personas en contra de la democracia. Puede que yo esté algo escorado a babor, pero no perdono, y en consecuencia no voto, a quienes nos conducen al caos con sus decisiones. Tampoco voto a los que viven de la democracia, pero no creen en la democracia.