Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, comparece por tercera vez en lo que va de año ante el juez Juan Carlos Peinado, que la ha citado para declarar por los nuevos delitos que le imputó en relación con la contratación de un software para la cátedra que codirigió en la Universidad Complutense.
Lo hará en medio de unas medidas de seguridad similares a las ocasiones anteriores: accederá a los juzgados por el garaje y se limitará la entrada en la planta en la que se ubica el Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid, que la investiga.
Así lo ha decretado la jueza decana de Madrid, María Jesús del Barco, que ha vuelto a acceder a la petición del Departamento de Seguridad de Presidencia del Gobierno, al advertirse «un posible riesgo para la integridad física de Begoña Gómez».
Explica que Presidencia ha aportado un informe en el que se señala que «existe un ambiente hostil y de rechazo social evidente, lo que da lugar a que en ocasiones se produzcan interpelaciones e insultos a través de megafonía, con exhibiciones de diversas pancartas, tanto a la entrada como a la salida de la investigada».
Desde que se abrió la causa en abril, Begoña Gómez ha ido dos veces al juzgado: en la primera se suspendió su comparecencia porque no se le notificó la querella de la asociación ultracatólica Hazte Oír; y en la segunda, se acogió a su derecho a no declarar.
Este miércoles está citada para declarar como investigada por los presuntos delitos de intrusismo y apropiación indebida que le imputó el juez tras admitir una segunda querella de Hazte Oír que atribuía a Gómez haber inscrito a su favor el software para la cátedra Transformación Social Competitiva que codirigía en la Complutense y haber redactado unos pliegos para la contratación.
Estos dos delitos se suman a los de presunto tráfico de influencias y corrupción en los negocios, por los que investiga también al empresario Juan Carlos Barrabés, al rector de la Complutense, Joaquín Goyache; y al exconsejero madrileño y directivo del Instituto de Empresa Juan José Güemes.
Güemes es el segundo en declarar este miércoles como investigado, condición que pasó a tener en la causa después de que el juez interrumpiese hace un mes su comparecencia como testigo para imputarle ante las contradicciones en sus explicaciones sobre la contratación de Begoña Gómez como responsable del instituto África Center, que depende del IE.
La responsable de Recursos Humanos del IE señaló a Güemes como la persona que ordenó contratar a Gómez, y el directivo del IE explicó que la contrató a pesar de que su currículo no se ajustaba al IE, pero no porque sea la mujer del presidente del Gobierno, según informaron fuentes jurídicas aquel día.
Está previsto que en las declaraciones intervenga el letrado de Hazte Oír en representación de las acusaciones populares, en lugar de la letrada de Vox, según han informado fuentes jurídicas.