Eduardo de Urbano, abogado de la exconsellera de Justicia Salomé Pradas, ha afirmado que su clienta, que ha declarado este viernes como investigada en el Juzgado de Instrucción número 3 de Catarroja (Valencia), «no está bien» y ha subrayado, de su testimonio, que el día de la dana estuvo «al pie del cañón».
El letrado se ha pronunciado en estos términos en declaraciones a los medios de comunicación que esperaban a las puertas de la Ciudad de la Justicia de Valencia la salida de Pradas tras su interrogatorio. Sin embargo, no ha salido por la puerta principal de los juzgados, como suele ser habitual, y ha esquivado a los numerosos medios que le esperaban por las distintas salidas. Hoy también ha declarado en el juzgado el ex número dos de Pradas, Emilio Argüeso, quien tampoco ha sido visto tras su declaración por los medios de comunicación.
Respecto a la declaración de Pradas, su abogado ha manifestado que ha ido «bastante bien» y que ha contestado a 140 preguntas durante más de dos horas: «Ha dado muchos detalles de su papel esa jornada, se ha referido a la cantidad de normas que regulan esta cuestión, porque hay normas del Estado, normas autonómicas y otras que afectan a ayuntamientos», ha enumerado. «Ha contado -ha agregado- que estuvo allí al pie del cañón durante toda la jornada y que las decisiones que se tomaron fundamentalmente dependieron de la información que les llegaba, a través de los medios de comunicación y de lo que llegaba al Cecopi».
Preguntado por cómo se encuentra ella, ha manifestado que «no está bien» e, interpelado por si su representada ha hecho referencia al presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, durante su comparecencia judicial, ha declinado dar algún tipo de información al respecto.
Por su parte, los abogados de las asociaciones de víctimas se han acercado a los afectados por la riada que han estado toda la jornada a las puertas de la Ciudad de la Justicia para contarles cómo han transcurrido los interrogatorios y les han señalado que ahora deben de seguir unidos y con fortaleza. Los familiares han recibido la información entre aplausos, lloros y abrazos.
En un pueblo de Mallorca hace pocos años hubo también una riada catastrófica que se llevó 13 vidas por delante. Nadie acusó de "asesina" a la entonces presidenta de la comunidad autónoma y seguro que no lo era. Pero influyó en ello el que fuese un gobierno de izquierdas y no uno de derechas como el de Valencia...? No vimos bramar al Baldoví de turno exigiendo dimisiones....