Las fotos de Tess Thompson Talley, una cazadora de Kentucky, en las que que muestra orgullosa su presa, una jirafa negra abatida durante un safari en Sudáfrica, ha enfurecido a los defensores de los animales en las redes sociales tras su publicación en diversos medios.
A pesar de que las imágenes son de 2017, ha sido ahora cuando han trascendido. Una de las cosas que más ha indignado a los defensores de los animales ha sido la actitud de la cazadora, quien en un post daba «gracias a Dios» por la cacería soñada.
«Una blanca salvaje americana que es en parte neanderthal, viene a África y mata una jirafa negra muy rara, cortesía de la estupidez de Sudáfrica», clama Africland Post en su cuenta de Twitter.
Por su parte, diversas asociaciones de cazadores han salido en defensa de la joven, recordando que gracias al dinero que los parques ingresan de las cacerías se pueden mantener económicamente.