La emoción estrangula a veces la voz hasta dejarte sin palabras. Y eso le ocurrió a Alejandro Sanz este sábado durante el concierto que ofreció en el estadio del Espanyol con motivo de la gira de su último trabajo, ElDisco, en Barcelona. Una noche que, sin duda, ya es inolvidable para el cantante y para todos aquellos que fueron testigos de uno de los momentos más especiales del concierto y que ha inundado las redes de su propio challenge viral, #elgestodelaemoción.
Antes de llegar a ese instante, la noche estuvo marcada por otros 'momentazos', como fue la invitación sorpresa de Shakira. «Yo tengo una de esas amigas que sólo con su cercanía me cambia el pH del alma y si yo pudiera pedir un deseo para este concierto sería cantar con ella. A pesar de que ella es como un planeta que órbita en otra galaxia, le pregunté si vendría a darnos un abrazo. Y me dijo que sí », dijo el cantante para presentar a la de Barraquilla. Y con La tortura se desató la locura.
La actuación no defraudó. Los movimientos imposibles de Shakira contagiaron a las miles de almas congregadas en el estadio Cornellà-El Prat, que disfrutaron de una actuación cargada de energía y complicidad entre ambos. No fue la única invitada. Le acompañaron también Judit Neddermann y Arcangel.
Pero, sin duda, el instante estrella de la noche estaba por llegar. Cantaba Alejandro Sanz El trato, cuando miles y miles de globos blancos se iluminaban con la luz de los móviles. Una iniciativa propia de los fans que cortó el aliento del cantante, y su voz. Cubriéndose el rostro con el antebrazo, lloró. En ese instante, el estadio se caía, y las pantallas gigantes recogían el momento. «Estáis locos, qué barbaridad. Voy a empezar de nuevo, ¿vale? Os quiero, os amo».
Este lunes Alejandro Sanz ha querido agradecer a sus seguidores el 'regalo' que le hicieron durante el concierto y lo ha hecho a través de las redes sociales.
El gesto de Alejandro Sanz cubriéndose la cara en este momento de gran emoción ha dado la vuelta el mundo y, en las redes sociales, ya tiene su propio challenge.